La arquitecta Fernanda Marques firma el primer espacio Roca Gallery de Sudamérica.
La arquitecta y diseñadora brasileña será la artífice del primer espacio Roca Gallery de Sudamérica. Una mujer de inquietudes multidisciplinares cuyos proyectos beben de la tradición brutalista, pero se suavizan y se abren de par en par al exterior.
Arquitectura, interiorismo, diseño, paisajismo, comunicación visual... la formación en diversas disciplinas de Fernanda Marques se traduce en ese concepto global tan característico que tienen sus proyectos. Líneas limpias para ambientes sofsticados. Háblame del proyecto Roca Gallery Se retoma después de 3 años y me siento emocionada porque va a estar en una zona donde hay bellas mansiones (aquí vivía la aristocracia a principios del siglo XX). Roca Gallery estará en una pequeña plaza diseñada por Burle Marx ( nuestro más importante arquitecto de paisajes) y el interior estará muy conectado con el exterior con grandes puertas correderas de cristal. ¿Qué desea transmitir con su arquitectura? La mayoría de las veces lo más importante para mí es llegar a conocer lo que quiere la gente que va a vivir en ellos y estoy encantada de ver que todos son diferentes. ¿Proyectos residenciales o de contract? No tengo preferencias. Hay algo muy atractivo en mi profesión y es que cada día haces algo distinto. ¿Un trabajo del que se sienta orgullosa? De los últimos. La razón es porque hay algo bueno en hacerse mayor: cuando tienes madurez trabajas mejor, las soluciones vienen más rápido y es más fácil entender tus proyectos y hacer frente a las difcultades. ¿El mayor reto en un nuevo encargo? Entender lo que los clientes quieren. A veces ellos no lo saben, sólo tienen una idea, y tengo que adivinar, para que al fnal se reconozcan en el resultado.
¿Curvas o rectas? Soy contemporánea, por las líneas rectas y los grandes espacios, y tengo influencias brutalistas, pero mis proyectos están muy bien conectados con el exterior. ¿Sus materiales favoritos? Cemento, por la larga tradición brasileña, y estructuras de acero porque puedo tener aberturas más grandes. ¿Y los colores? Generalmente neutros pero siempre con un punto de color llamativo. No utilizo muchos tonos porque en Brasil no lo necesitamos: están todos en el exterior. ¿De dónde nace su inspiración? Sobre todo viene del lugar del proyecto, de los mensajes que me da respecto a la luz, los colores… También la moda es una fuente de inspiración: Mcqueen, Alaïa… Tres argumentos que admira Paulo Mendes de Rocha, fue mi profesor y es muy importante en el modo en el que yo pienso la arquitectura; Zaha Hadid porque es la única mujer que conozco tan reconocida por su trabajo; y Shigeru Ban, adoro el modo en que construye y piensa en bambú y cemento.
“Hay algo muy atractivo en mi profesión: cada día haces algo distinto”
No hay mejor muestra de lo que los interioristas holandeses Joyce Urbanus y Dax Roll, Nicemakers, son capaces de hacer cuando tienen un espacio entre las manos que su propio apartamento en Haarlemmerstraat, una de las calles de moda del centro de Ámsterdam. Sus 60 m2 en la primera planta de un edificio construido en 1745, nos hablan sin palabras del estilo, la personalidad, los gustos y la perfecta simbiosis de una pareja que comparte pasión por los espacios bellos y con carácter. Estos interioristas holandeses fundaron su estudio, Nicemakers, en 2011 y, en pocos años, han ganado prestigio nacional e internacional, por sus proyectos de hoteles, restaurantes y residencias privadas. Al ver este piso, ¿fue amor a primera vista? Dax: Sí. Joyce y yo vimos inmediatamente sus posibilidades. Además, está en una de las calles más hip de Ámsterdam, llena de tiendas, cafeterías, bares y restaurantes... Propusimos al propietario una profunda renovación, antes de alquilarlo. ¿En qué consistió la reforma? Joyce: En una renovacion total para conseguir una distribución abierta, sin puertas. Realizar cocina y baño nuevos, además de un dormitorio y un vestidor. Queríamos dar apertura a la casa. Y poner nuestra esencia. ¿Cómo describes el mix -match que hay aquí? Dax: Ambos elegimos combinar piezas de diseño vintage, mobiliario hecho a medida -como el aparador, la daybed y el mueble de la cocina, todos diseñados por nosotros-, y nuestros objetos personales, la mayoría encontrados en nuestro viajes. Blanco es el elegido por Dax y Joyce para modernizar el apartamento. De este color se pintaron las vigas originales del techo, se tiñó el suelo de mosaico de roble y se lacó la carpintería de las ventanas. Detrás del sofá, regalo de los padres de Dax, obras de Evert Thielen, San Ming e Ingeborg Oderwald. Relajación total en la daybed, diseñada por la pareja para un rincón del salón. La obra es de San Ming.
¿Qué buscábais y cómo lo conseguisteis? Dax: Actualizar el interior. Este proyecto muestra la habilidad de Nicemakers para elevar el nivel de un interior de una manera simple. Optamos por una selección de blancos rotos para las paredes y el techo del salón y del baño, un color que moderniza los detalles históricos, como el techo de vigas y los marcos de las ventanas. Pero, para el pasillo que conduce hacia el dormitorio y el vestidor, elegimos un color oscuro más dramático, que refleja la transición del día a la noche. Y pusimos el toque Nicemakers, añadiendo detalles cálidos, cobrizos, dorados, naranjas y ocres. ¿Lo que más os gusta de este apartamento? Joyce: La comodidad que ofrece y su eficiencia. Es compacto, perfecto para dos personas. Aquí podemos relajarnos, trabajar e incluso dar fiestas. Ésta es nuestra vida, en el lugar adecuado, con los elementos adecuados y la energía adecuada. ¿Qué le da el alma a la casa? Dax: Nuestra colección de objetos, prueba de nuestra personal búsqueda de atmósferas e historias. Cada cosa está conectada a un recuerdo y trae nuestra individualidad a este interior. Tu quieres tocar los objetos, mirarlos de cerca y de todos sus ángulos, acariciarlos, sentir su estructura y su textura. Todos ellos combinan tanto la armonía como el contraste.
¿Cuáles son vuestras piezas favoritas? Dax: La lámpara de mesa de cristal con dorados, la mesa de comedor, de Martin Visser, y también la lámpara de pared vintage, de Gaetano Sciolari. ¿Por qué elegisteis estos colores y texturas? Dax: Los blancos rotos y los tonos cobrizos funcionan bien juntos; al igual que la calidez natural que da la madera de los muebles vintage y el glamour que aportan los objetos encontrados por casualidad. ¿Cómo enfrentáis cada proyecto? Joyce: Poco a poco apuntamos nuestros pensamientos e ideas. Tratamos de captar la esencia de cada cliente para entender y analizar bien. Y de este flujo de ideas y atmósferas surge el concepto. Cuando empezamos un proyecto, no solo vemos el espacio o el ambiente, sino también a las personas que lo van a usar, la atmósfera es tangible y palpable, podemos oír el sonido del espacio, su zumbido y su “música”. ¿Habláis de trabajo cuando estáis en casa? Joyce: Las oficinas de nuestro estudio están a 10 minutos de aquí y son el lugar para trabajar. Nuestro apartamento es para relajarnos y estar con los amigos. ¿De qué estáis más orgullosos? Joyce: De que cada uno de nuestros proyectos de interiores empieza con libertad de pensamiento e inspiración. Ese es nuestro enfoque. Y en esta casa, también. ¿Cuál es el significado de ‘ hogar’ para vosotros? Joyce y Dax: Es dónde y cómo vivimos y amamos.