TRISTÁN DOMECQ LO PERDURABLE COMO SELLO La
Sobriedad y atemporalidad le definen. Y la mezcla
(de estilos, pero sobre todo de épocas) es la máxima expresión de esa estética. Al frente de un equipo de profesionales de la arquitectura, el diseñoy la decoración, Tristán Domecq afronta cada reto con la pasión de hacer de la necesidad virtud. Esta casa es un ejemplo. www.tristandomecq.com
luz reina y gobierna, se adueña de los espacios, los hace más livianos en esta casa firmada por Tristán Domecq Interiorismo. El estudio ha transformado un piso de difícil estructura arquitectónica en una vivienda contemporánea diáfana y aristocrática.
Aunque la casa forma parte de un edificio de los años 40, no conservaba ningún elemento original y la reforma se encaminó, precisamente, a recuperar las singularidades de las que carecía. De hecho, la distribución era demasiado complicada debido a los pilares y los muros de carga. “Para adaptar la distribución a dichos condicionantes creamos las embocaduras de piedra entre el hall y el salón”, explican desde el estudio. El empleo de materiales nobles reclama esa solera tan añorada: la caliza y el mármol envejecido, la madera de roble en diferentes tonalidades, el estuco utilizado en los revestimientos de paredes, la forja, los papeles pintados de lino... Y, por supuesto, los muebles. La gran mayoría diseñados o procedentes de Tristán Domecq Casa.
Los propietarios deseaban una decoración señorial y con un touch masculino. La piedra negra enfatizando las zonas de paso y las molduras clásicas que rematan los techos fue la firme apuesta del interiorista para dar forma a ese look. También la sobria gama cromática: “Hemos elegido una paleta con algunos toques más vivos pero sin recargar mucho”, aclara. Blancos, crudos, marrones, negros. Y como contrapunto electrizante, el verde turquesa de una obra de arte, el rojo, el amarillo o el azul de los textiles, los estampados de rayas y flores... Una elegancia cálida, llena
• de sorprendentes matices, es el magnífico resultado.