LA NUEVA GABRIELLE
Libre, rebelde, apasionada, fuerte... Así fue Coco y así es Kristen Stewart, la imagen del nuevo HIT olfativo de Chanel.
Kristen Stewart, ‘by’ Chanel.
Si has nacido sin alas, no hagas nada para impedir que crezcan», dijo Gabrielle Chanel (Saumur, Francia, 1883), más conocida por su apodo, Coco. Y justo esa actitud libre y apasionada es lo que se vislumbra en todo lo que rodea al lanzamiento olfativo del año de la maison que fundó, y que, en su honor, se llama Gabrielle Chanel. Se trata de un perfume que busca representar a una mujer sin ataduras, fuerte, segura de sí misma, rebelde, independiente... Como lo es la actriz que le pone cara: Kristen Stewart. Un rostro muy familiar en la firma, tiene relación con ella desde que en 2013 fue nombrada embajadora, y lo ha sido tanto en moda (es una de las it girls imagen
del modelo de bolso que comparte nombre con la fragancia) como en las colecciones de maquillaje. Y, según la casa parisina, encarna todo lo que debería ser la nueva Gabrielle. Para darle forma (o más bien aroma) han contado con el savoir faire del nariz Olivier Polge, que ha trabajado en colaboración con el laboratorio de Creación y Desarrollo de perfumes de la marca. «Chanel no me dio ninguna directriz, y eso es algo fabuloso; tuve carta blanca para crear. Por ejemplo, el nombre se decidió hacia mitad del proceso, así que tampoco fue un hecho que me condicionara», relata el responsable del jugo que ahora se estrena. En éste concurren actitudes potentes, como la rebeldía, la audacia y la intrepidez, para representar a todas las mujeres con independencia de su edad. «Antes de empezar, consulté los archivos. Descubrí que abundaban las flores blancas, pues Coco Chanel las adoraba, y decidí crear una especie imaginaria, con la combinación y mezcla de algunos de los pétalos más representativos», desvela el experto. Para la ocasión, se potenciaron ciertas características de cada ingrediente, de una manera que no se había llevado a cabo anteriormente. Por ejemplo, se aumentó la intensidad del jazmín, se reforzó el peso del nardo blanco vistiéndolo con madera de sándalo láctea y se dio un twist más fresco a la flor de azahar, combinándola con mandarina, pomelo y grosella negra, además de incluir la exótica ylang-ylang con notas de almizcle blanco. El resultado es luminoso, alegre, potente y muy Chanel. Por ello, Polge se muestra muy seguro del resultado final: «Quizás resulte osado decir esto, pero teniendo en cuenta que hemos empleado algunos de los acordes preferidos de mademoiselle Chanel, me aventuraría a afirmar que a ella le habría gustado este nuevo perfume».
NOTAS PERSONALES «A COCO LE PODRÍA HABER GUSTADO, HE USADO SUS FLORES FETICHE», APUNTA OLIVIER POLGE