MADE IN COLOMBIA Pon rumbo a la tradición ‘nature’.
La moda pone rumbo al país en el que reinan el color, la artesanía, la TR ADICIÓN y la naturaleza. ¿Te vienes?
Es mi punto de partida, mi inspiración, mi fuente de técnicas artesanales y mágicas... Adoro los tonos de su mar, la altura de sus montañas y la fuerza de su selva. Es un lugar para enamorarse». Así habla Mercedes Salazar de su país, Colombia; una nación que ahora, más que nunca, está en auge en el mundo del diseño. Ella es uno de los muchos nombres que dan fe de que Barranquilla, Bogotá, Cali, Medellín y demás ciudades de este maravilloso territorio son cuna indiscutible de grandes talentos fashion que traspasan fronteras. Los denominadores comunes de todos ellos son la pasión por sus raíces, la artesanía como condición irrenunciable y la alegría de vivir.
Para Esteban Cortázar, que vio cómo su carrera despegaba a lo grande en 2008, tras ser nombrado director creativo de Emanuel Ungaro con poco más de 20 años, Colombia es «color, sonrisas, calor humano, baile y paisajes alucinantes». Y remata: «Mis raíces son parte del alma de mi marca». Esta esencia se plasma en las piezas de la etiqueta que lleva su propio nombre, y a las que Gwyneth Paltrow o Karolina Kurkova ya han caído rendidas. Creaciones en las que se transmite la adoración por un país vitalista y multicromático.
SU PATRIA ES UNA FUENTE DE INSPIRACIÓN CONTINUA PARA MUCHOS DE LOS CREADORES DE ESTA RECIENTE OLEADA
¿Más ejemplos? Silvia Tcherassi lleva más de 25 años plasmando la paleta del Caribe en sus piezas arquitectónicas producidas con materiales naturales como el lino, y en sus reconocibles camisas blancas que se reinventan cada temporada. Nacida en Barranquilla, ha desfilado en las semanas de la moda de Milán y París, e incluso ha recibido el título de caballero de la Orden de las Artes y las Letras, un reconocimiento otorgado por el gobierno francés a líderes indiscutibles de la cultura. «Tenemos una gran riqueza natural y artística, con grandes talentos en distintos campos, desde Fernando Botero a Gabriel García Márquez, Radamel Falcao o Shakira. Ellos son la imagen más reconocible de un pueblo pujante, trabajador y que ha demostrado que no se deja doblegar por circunstancias adversas», apunta la diseñadora. Por eso, desde hace diez años, trabaja con la comunidad indígena wayuu de La Guajira. «Su labor artesanal es maravillosa; conservan la tradición y las técnicas ancestrales», destaca. Un hotel de lujo en Cartagena de Indias y una colección de hogar completan el imperio de Tcherassi. También presume de apostar por una producción plena en su amada tierra natal la joven Paula Mendoza, que da forma a joyas con carácter geométrico de las que es fan hasta Beyoncé, y emplea para ello materiales y mano de obra 100% locales. Recientemente, la firma L.A. Cano ha dado fe de su talento nombrándola directora creativa. Otra diseñadora emergente es Kika Vargas, que hace de los volúmenes y los plisados sus partenaires de costura. La bogotana empezó a sonar fuerte tras desfilar en Colombiamoda, la feria más importante de la región. Después, la boutique online Moda Operandi le abrió sus puertas y, a partir de ahí, empezó una gran historia en la que sus raíces priman: «Este país es único, está lleno de vida y de alegría. Es una mina de flores de todas las formas, tamaños y colores, y ellas son mi máxima inspiración». Prácticamente todos estos creadores colombianos coinciden en resaltar ciertos aspectos de su tierra: la artesanía indígena, la belleza de la tradición y el folclore, la exuberancia y las tonalidades de su flora y su fauna, una sonrisa que nunca se pierde... Nancy Gonzalez, por ejemplo, refleja toda esa riqueza cultural y natural en sus exóticos bolsos handmade en Cali, mientras que el mundo entero se ha rendido al calzado
LA MODA HECHA EN COLOMBIA APUESTA POR LA ARTESANÍA DE LOS ZENÚES DE CÓRDOBA Y DEL PUEBLO WAYUU, ENTRE OTROS
COLORES Y MATERIALES NATURALES, VOLÚMENES BASADOS EN LA SELVA O ‘PRINTS’ TROPICALES SE HAN PUESTO DE MODA EN ESTOS ÚLTIMOS AÑOS
del cartagenero Edgardo Osorio, que ha logrado que Meghan Markle le dé el sí, quiero a su firma Aquazzura, llevando sus zapatos el día de su boda. Olivia Palermo y Lily Collins, por su parte, han declarado su amor por Johanna Ortiz, por sus patronajes en los que manda el volumen y por sus prendas de ritmo tropical. Y la lista no deja de ampliarse: Pepa Pombo (y su hija Mónica Holguín, actual responsable de la firma), con sus creaciones en punto con bordados exquisitos, o María Elena Villamil y sus armónicas mezclas de tejidos o sus asimetrías perfectas también llevan Colombia al mundo. Tradición y moda latinoamericanos han alcanzado por fin la cima del diseño. ■