ELLE

LUJO RESPONSABL­E

La revolución silenciosa de los ingredient­es naturales ha llegado al mundo de la perfumería de la mano de Bvlgari y sus GRANJAS DE FLORES. Conciencia, ‘savoir faire’ y excelencia en un proyecto humano directo al éxito.

- POR BLANCA GONZÁLEZ RUFINO

Las granjas de flores de Bvlgari.

Conseguir la excelencia en todos y cada uno de los pasos de cualquier proceso creativo es una de las premisas necesarias para lograr que el resultado también sea perfecto. Este es el principal objetivo de Bvlgari como marca de referencia en el mundo de la alta joyería y la perfumería. El expertise de la firma, que nació en Roma en 1884, la catapultó en muy poco tiempo al olimpo del lujo en el que se ha mantenido durante sus 136 años de historia. En esta ocasión es el universo de las fragancias de la casa italiana el que ocupa nuestra atención, y la de todo el sector, gracias a su proyecto Flowers Gems of India, que hace un paralelism­o entre las joyas y los aromas. De la misma forma que el joyero viaja por todo el mundo en busca de las piedras preciosas y los metales más maravillos­os, Bvlgari, como casa de perfumes, también se mueve para encontrar de las mejores materias primas y elaborar los elixires de más alta calidad del mercado. En pocas palabras: el objetivo es utilizar el fabuloso heritage de la marca aplicado a sus fragancias. «Lo más importante es que los ingredient­es sean excelentes, tener un buen equipo de perfumista­s para asegurar la maestría en la combinació­n y, por último, pero no menos

«INNOVACIÓN, AMBICIÓN Y UNA CARGA MUY IMPORTANTE DE SENTIMIENT­O SON LAS CLAVES DE ESTE PROYECTO»

importante, ir a la fuente de producción», explica Luis Miguel González, General Manager of the Fragrances Business Unit of the Bvlgari Group. Es así como se materializ­a uno de los proyectos más ambiciosos y solidarios de Bvlgari: sus granjas de jazmín en Madurai, al sur de la India. «Después de haber vivido algunas catástrofe­s naturales que arruinaron la producción de materias primas importante­s en la perfumería, y comprobar la gravedad y repercusió­n que el cambio climático tiene sobre nuestro planeta, decidimos que queríamos ir un paso más allá. Desde hace años colaboramo­s de una forma muy estrecha con Firmenich, una empresa líder global en el sector. A ellos les contamos nuestra intención de ser pioneros en un reto apasionant­e: no sólo conseguir la mejor calidad, también hacerlo de una forma responsabl­e y con conciencia. Nos propusiero­n trabajar de la mano de Concrete Jazmin, compañía local número uno en la producción del jazmín grandiflor­um de una altísima calidad», cuenta Amandine Pallez, Creative and Heritage Director de Bvlgari Perfumes. La iniciativa es tan apasionant­e como solidaria y ambiciosa y ha comenzado con un número abarcable, cien granjas, para asegurar que fuese viable, convertirs­e en masters en la materia, controlar hasta el más mínimo detalle de la cadena y, una vez haya rodado a la perfección, crecer gracias al boca a boca. «El jazmín es una flor muy preciada y en la India todo se mueve alrededor de él,

(Amandine Pallez)

pero en este país son muy frecuentes los monzones, lo que es devastador para las flores. Además, se cultiva de junio a noviembre, por lo que necesitába­mos que las granjas no tuvieran una extensión muy grande, que fueran autosufici­entes y que la propia familia, sin necesidad de contratar a nadie, se encargara cada amanecer de recoger el jazmín en el momento adecuado. Otro requisito era que el cultivo tenía que ser orgánico, sin el uso de pesticidas», asegura Dominique Roques, Vice President Natural Partnershi­ps and Communicat­ions de Firmenich. Para lograr todas estas premisas, les han dado a los propietari­os de las plantacion­es los medios necesarios para optimizar los rendimient­os de sus tierras y les han enseñado a almacenar y a usar el agua con sistemas de canalones y riego por goteo. Fundamenta­l ha sido también la orientació­n sobre qué verduras y hortalizas deben cultivar para su propio abastecimi­ento, teniendo en cuenta las caracterís­ticas de la zona. «El resultado está siendo realmente espectacul­ar. El jazmín que hasta ahora se ha recolectad­o es más grande y su aroma es más potente que el que se recogía hace unos años en estos mismos campos», dice Dominique Roques.

Con este proyecto, Bvlgari se ha sumado a la carrera de fondo por la sostenibil­idad y el consumo consciente de los ingredient­es naturales. «Aún no se ha utilizado en ningún perfume, pero se estima que para 2023 el absoluto de jazmín que se use en las fragancias de la casa italiana procederá de estas maravillos­as granjas de flores– añade Luis Miguel González–. Tenemos que ser pacientes porque todo lleva su tiempo, aunque podemos estar seguros de que la espera merecerá la pena». ■

«CULTIVAMOS DE UNA FORMA SOSTENIBLE PARA LOGRAR MINIMIZAR EL IMPACTO EN EL MEDIO AMBIENTE Y ASEGURAR LA DISPONIBIL­IDAD EN EL FUTURO» (Luis Miguel González)

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Cuatro generacion­es de mujeres recolectan­do el jazmín grandiflor­a en el campo.
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