Un mercado hipotecario más transparente
ESTOS MESES SE TRAMITARÁ, POR FIN, LA REFORMA HIPOTECARIA EXIGIDA POR LA UE, CON MÁS PROTECCIÓN PARA EL CONSUMIDOR.
Con el nuevo curso político llega, por fin, la tramitación de la reforma hipotecaria. Lo hace con año y medio de retraso, pero se trata de una normativa muy esperada por parte de las asociaciones de consumidores, ya que puede mejorar muchísimo la protección de los usuarios de este tipo de productos al intentar crear un mercado hipotecario mucho más transparente y seguro. Estos son los cambios que se avecinan:
Nuevas responsabilida-
des para la banca. Para empezar, se busca que las entidades financieras asuman una mayor responsabilidad a la hora de conceder hipotecas, por ejemplo, prohibiéndoles que liguen los salarios de su plantilla al número de préstamos hipotecarios firmados. Además, obliga a las entidades financieras a disponer de profesionales competentes para evaluar la solvencia de quienes adquieran préstamos inmobiliarios y establece un fase precontractual de siete días para que el consumidor pueda valorar la oferta hipotecaria, en la que se debe incluir detalladamente las variaciones de las cuotas mensuales que pagará en base a la evolución de los tipos de interés (para las hipotecas de interés variable). Otra exigencia de transparencia es que en los nuevos contratos debe constar de forma clara cláusulas controvertidas, como las de vencimiento anticipado, los intereses de demora o el reparto de gastos de constitución de la hipoteca.
El fin de muchos recar-
gos tradicionales. Otra gran novedad es que los bancos tendrán que eliminar recargos clásicos, como los establecidos por amortización anticipada. Y acabar con prácticas como la venta cruzada de otros productos (seguros de vida y hogar, por ejemplo), que hasta ahora utilizaban como forma de mejorar las condiciones de la hipoteca.
Más protección ante los
deshaucios. También se regulará la dación en pago como forma de saldar la deuda hipotecaria y se obligará a las entidades financieras a que establezcan un plazo tolerante antes de iniciar un desahucio. Además, se endurecen las causas por las que iniciar un desahucio: así, en lugar de tramitarse ante un número determinado de cuotas impagadas como sucede hasta ahora, se establecerá en base a un porcentaje del valor del préstamo, que puede oscilar entre un 2% y un 5% del mismo. También se intenta evitar los abusos en los intereses de mora, estableciendo un tope máximo que no podrá superar el triple del tipo de interés legal del dinero.
Hipotecas multidivisas. La nueva legislación no entrará en las exigencias de buena parte de los consumidores de este tipo de productos, que se han sentido mal informados sobre las consecuencias que podría tener sobre sus obligaciones financieras con el banco la apreciación o depreciación de la moneda referenciada en la hipoteca. Pero sí introduce una novedad importante para este tipo de productos: en el momento que se desee, se podrán convertir a euros o a cualquier otra divisa en la que cobre sus ingresos recurrentes el interesado.