Han escuchado al cliente y, gracias a ello, han triunfado
Hablamos de las panaderías-cafeterías, un modelo de negocio que ha revolucionado la forma de consumir pan, tras atender y cubrir las demandas de un público ávido de novedades. -
Las panaderías-cafeterías en franquicia (bakery coffee, si nos ponemos estupendos) constituyen uno de los fenómenos más interesantes de los últimos años. Hablamos de negocios con una ambientación muy cuidada, precios competitivos y con una amplia oferta que busca atraer al cliente en cualquier franja horaria. Una fórmula que ha revolucionado el modelo tradicional de panadería, hasta configurar un nuevo sector de actividad, con entidad propia.
Para entender las claves de un mercado con un crecimiento fulgurante, reunimos, en la XXIII edición de los Desayunos Emprendedores, a (director de Franquicias de Bertiz),
(directora de Desarrollo de Bertiz),
(directora de Marketing de Santagloria),
(consejero delegado de Pannus) y (responsable de Expansión de Panaria), a los que se unieron, como moderadores,
director de EMPRENDEDORES, y
responsable de Contenidos de Franquicias de la revista.
Jaime Sáez Arrenega Giménez Llarás Alejandro Vesga, M. Nóvoa, Florbela Reyes Agustín Vicente Flor Claudio SENSACIÓN EN CADENA
¿A qué atribuyen el éxito del formato? Ésta fue la cuestión con la que arrancó un encuentro celebrado en la sede central de Hearst España (grupo editor de EMPRENDEDORES).
“El sector se ha adaptado muy bien a las necesidades del consumidor en cuanto a productos, experiencia y ambientes, de ahí que haya encontrado un hueco propio”, comentó Reyes Giménez. “Los operadores han introducido novedades, en un mercado donde, en muchas ocasiones, la experiencia de consumo prima sobre el propio producto”. Vicente Flor se remontó a los inicios de la crisis económica, en la década pasada, para explicar el auge de la actividad.
“Asistimos entonces a la evolución de los bares tradicionales hacia las cafeterías con encanto y con el pan como hilo conductor. Hasta ese momento no había, sobre todo para el público femenino, el 80% de nuestra clientela, un sitio donde estuviesen a gusto, sin máquinas tragaperras, sin olor a freidora… Esto hizo que el modelo de negocio resultase tan atractivo. Otros factores, como la flexibilidad inmobiliaria del momento, permitieron consolidar la expansión”, detalla Flor.
En una línea similar, Florbela Arrenega habló de un sector, en su momento, muy tradicional. “El panadero de toda la vida no era capaz de evolucionar, de traer referencias de calidad e ir así al encuentro del consumidor, algo que sí han hecho unas cadenas con un intenso componente innovador”.
Jaime Sáez también viajó unos años atrás. “Las bakery coffee eran entonces muy básicas, con poca decoración, mucho producto visible en la tienda… Ante la escasez de dinero, la gente primaba la cantidad. Hoy se cuida más la exposición, se repone con mayor frecuencia el producto con el objetivo de que el público perci-
“Hemos logrado que el cliente hoy se desplace a un sitio determinado a por una barra de pan”