Ideas ‘locas’ que pueden ser rentables
Una mini-cadena de tiendas de vino para mujeres, una marca de zapatos que te invita a felicitar a los zapateros y vestidos de novia a domicilio Beverly Hills style.
VINO PARA MUJERES. Vamos a hacerte un pequeño examen. Si nosotros te decimos que nos hemos encontrado con un concepto de negocio
en el mercado del vino para celebrar el creciente número de mujeres en una industria dominada por hombres y hacerlo de una manera lúdica y educativa: ¿qué piensas? A) Uy, qué interesante. B) Hmmm, No me estáis contando nada nuevo. C) ¿No es un concepto basado en la discriminación positiva? La respuesta correcta es A +B +C y además hay que añadir una opción D: es un micronicho como una catedral. La única diferencia con el resto de tiendas del sector es que sólo vende caldos con sello ‘femenino’ y las tiendas están atendidas por mujeres. El problema: aunque se especialice en público femenino, al final compite con todas las tiendas de vino y los grandes vendedores online. Porque entendemos que a las bodegas dirigidas por mujeres les interesará ganar dinero para ser rentables y poder seguir dedicándose a sacar mejores vinos al mercado.
Se supone que, como señalan los expertos, siendo hiper-específico dentro de un micronicho, tendrás siempre, además, la posibilidad de fijar unos precios mucho más altos de lo que podrías permitirte si entraras en un mercado generalista con más competencia. Pero en este caso la especificidad no vale para nada. Como te vayas en los precios te sales del mercado. Esa es una forma de verlo. Otra es que la propuesta de valor no es suficientemente sólida para un mercado tan competitivo. El caldo tiene que ser bueno y estar en precio. Lo hagan mujeres, hombres o viceversa.
COMPRA UNOS ZAPATOS Y LUEGO FELICITA AL ZAPATERO. Pero, vamos, quien dice una tienda de vinos de Los Ángeles que sólo vende botellas #MeToo, dice también una empresa de zapatos
de lujo que te permite enviarle una tarjeta de agradecimiento (con el franqueo pagado) al fabricante de esos mocasines tan fabulosos que te has comprado online. El producto más barato cuesta 198 dólares y se posiciona como marca de lujo. Pero igual que con los vinos: o los zapatos son cómodos y bonitos o por mucho que le puedas enviar una tarjeta al fabricante… La empresa, estadounidense, la han montado dos ex Relaciones Públicas con muchas ideas de marketing.
A ver, que hemos sido un poco malos. La empresa tiene algo más: es un pequeño fabricante estadounidense que tiene su centro de diseño y el taller de fabricación en la Toscana y trabaja sólo bajo demanda. Cuando tiene suficientes pedidos pone a sus orfebres del cuero a trabajar, que trabajan con mimo el producto. De ahí lo de la tarjeta: Si nosotros nos molestamos en hacer bien las cosas, qué menos que tú te des cuenta de ello y nos felicites. Un poco narcisista, ¿no crees?
TRAJES PARA NOVIAS A
DOMICILIO. Sí, el concepto de low cost aplicado a los trajes de novias no
es nuevo. Inspirarte en diseños de terceras partes, sea en el nicho de la moda para novias sea en la moda en general, tampoco es nuevo. Ahora bien, sumarle la posibilidad de hacer una fiesta estilo tuppersex con vestidos por 25 euros ya es otra cosa. Es lo que propone Floravere, marca de vestidos de novia baratos que se inspira en diseños de actualidad (piensa en la boda de Meghan Markle y te haces una idea) que puedes (y debes) probarte en casa. Primero seleccionas online los modelos y la compañía te envía a casa un kit con el vestido de prueba. Cada kit cuesta 25 dólares y te puedes probar todos los que quieras. El kit tiene lo necesario para que te tomes las medidas y las envíes a los modistos del negocio. En 4 meses tienes tu vestido. Y si no te quieres casar te puedes sentir en la intimidad de tu casa como Novias de Beverly Hills. Lo que, señores, señoras, es mucho decir.