Los secretos mejor guardados de Juan Roig

Juan Roig hizo propia está cita de los autores del libro

Poco dado a las entrevistas, recogemos algunas frases de Juan Roig, presidente de Mercadona, extraídas de la presentación anual de los resultados de la compañía y de la Memoria de 2018, que permiten conocer las claves de éxito de esta empresa familiar, que ha pasado de pequeña tienda de ultramarinos en 1977 a líder del sector: en 2018 registró unas ventas de 24.305 millones –un 6% más que en el año anterior– y un beneficio neto de 593 millones, un 84% más.

"El éxito, si es compartido,

sabe mejor". Esta máxima recorre transversalmente toda la estructura de la compañía, incluidos los empleados. "Hemos repartido una prima de 325 millones de euros entre los trabajadores (el 25% de la plantilla)", en concepto de prima por objetivos, aseguró durante la presentación.

"Igual que las personas no vivimos solo para comer, tampoco las empresas existimos solo para lograr beneficios".

Capitalismo consciente, que defienden el impacto social de los negocios, para a continuación completarla, "ahora bien: las personas no podemos vivir sin comer y las empresas no podemos vivir sin beneficios". Toda una declaración de principios.

"Es necesario ser ágiles para adaptarnos con inmediatez a las nuevas necesidades de los clientes".

Fruto de esa necesidad, Mercadona ha combinado las figuras de interproveedor y del proveedor especialista, que existían hasta ahora, en una: proveedor totaler, del que, ¡adivina!, efectivamente, ya no importa tanto su tamaño como su especialización y agilidad para satisfacer a El Jefe, es decir, al cliente en terminología mercadoniana. Por cierto, en la actualidad ya cuentan con 1.400 proveedores totalers.

"Nuestro objetivo es ser la mejor opción para los clientes".

Las últimas iniciativas –el espacio Listo para Comer (comida preparada), su nuevo modelo de Tienda Eficiente, la apuesta por los productos frescos (ya disponible en 660 tiendas) y el proyecto de tienda online– responden a esa estrategia.

"La mejor forma de corregir los errores es tener la voluntad de admitirlos con humildad".