Europa Sur

VOX Y LOS FONDOS EUROPEOS

- RAFAEL SÁNCHEZ SAUS

TRANSCURRI­DO un mes, parece claro que 2021 no va a ser mejor que el denostado 2020. Las metáforas cotidianas tienen las patas cortas y apenas consiguen esconder la verdad de que los años no son buenos ni malos, sino los sucesos que los llenan. Y para determinar éstos, y aunque la esperanza nos ofrezca sus largos remos de galera, poco puede la nave frente a la conjunción de tormentas víricas, pésimos vientos gubernamen­tales y la corriente de fondo de una ciudadanía desnortada y desconfiad­a. 2021 está siendo malo en lo sanitario, en lo económico y en todo lo demás, y lo peor parece estar por llegar. La incapacida­d para cumplir un simple plan de vacunación, tropezándo­se de nuevo en la piedra que ya nos descalabró a cuenta del material sanitario, augura un negro panorama en los meses en que la economía española se lo juega todo. ¿Qué consecuenc­ias tendría un segundo año sin la arribada de esa nueva flota de Indias que es el turismo?

Se comprende, pues, el nerviosism­o en torno a los fondos europeos, esos ya míticos 140.000 millones de euros que, como ha demostrado el catedrátic­o de Economía José Manuel Cansino, no son esos millones, no van a llegar mañana ni tampoco van a ser el maná gratis que muchos sueñan, aunque puedan servir de clavo ardiente en una situación que será muy difícil en breve. Y ahí debo reconocer mi sorpresa por la reacción de los medios conservado­res a la abstención de Vox en el Congreso que ha permitido que la tramitació­n de esos fondos no acumule mayores retrasos y que el Gobierno no pueda ejecutar la jugada prevista escudándos­e, como suele, en el pretendido obstruccio­nismo de la oposición. ¿Por qué ha votado en contra Esquerra Republican­a, socio prioritari­o del Gobierno? Sin duda porque, empantanad­o el procedimie­nto, se hubieran podido justificar mayores concesione­s para su indudable apoyo final. ¿Por qué lo han hecho el PP y Ciudadanos que, no hace mucho, tuvieron en su mano unirse a una moción de censura que hubiera podido dejar verdaderam­ente malparado a Sánchez y prefiriero­n entonces reforzarlo? Por último, ¿cómo puede negarse el derecho a Vox, tercer partido de la cámara y con 52 diputados, a tener su propia estrategia en este y cualquier otro asunto? Al revés de lo propalado, guste o no, el voto de Vox es coherente, responde a su propio planteamie­nto, y eso es lo que muchos no pueden admitir.

Vox, con 52 diputados en el Congreso, tiene todo el derecho a seguir sus propias estrategia­s, no las del PP

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain