Villarejo sale de prisión al cabo de casi tres años y medio sin ser juzgado
● El ex comisario deja Estremera con medidas cautelares porque va a rebasar los cuatro años de prisión preventiva antes de ir a juicio ● Amenaza con contar “cosas muy interesantes”
El ex comisario José Villarejo salió ayer de la cárcel madrileña de Estremera, en la que permanecía desde noviembre de 2017, después de que el juez que le investiga en la Audiencia Nacional le haya dejado libre, tras constatar que va a ser imposible juzgarlo antes de que cumpla el máximo de cuatro años de prisión provisional.
La Audiencia Nacional ha señalado para el mes de diciembre el juicio por las tres piezas del caso Tándem cuya investigación está concluida, es decir, un mes más tarde de la fecha en la que Villarejo habría cumplido esos cuatro años privado de libertad sin haber sido juzgado.
El juez Manuel García Castellón reconoce que ninguna de las demás piezas en las que investiga a Villarejo (una treintena) podrá ser juzgada antes de esa fecha, de modo que mantenerlo en prisión preventiva “pudiera convertirse en una pena anticipada y comprometer, en consecuencia, el derecho a la presunción de inocencia”.
Por ello, de acuerdo con la petición de la Fiscalía Anticorrupción, ha acordado su libertad.
No obstante, tanto el juez como la Fiscalía advierten de que aún existe riesgo de fuga y de reiteración delictiva, de ahí que se hayan fijado estrictas medidas cautelares: comparecencias diarias en el juzgado más próximo a su domicilio, prohibición de salida de territorio nacional y retirada de pasaporte, “con requerimiento expreso de prohibición de obtener uno nuevo”, y la obligación de comunicar cualquier cambio de domicilio.
Pasadas las 18:30, Villarejo salió de la cárcel de Estremera, al sureste de la Comunidad de Madrid, casi a una hora de la capital, con un parche negro cubriendo su ojo izquierdo y ataviado con boina y mascarilla del mismo color.
Fue directo al grupo de periodistas que lo esperaba para dejar claro que no piensa huir, sino que se va a dedicar a defenderse y que va a hablar: “Es la única razón por la que me han tenido preso, para que no hablara”.
“Me lo han robado todo, pero no me pueden robar que siga creyendo en la justicia, porque entonces mi vida no habría tenido sentido”, manifestó el ex comisario, que sigue culpando de su estancia en prisión al ex jefe del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Félix Sanz Roldán.
“Lo único que quiero es defenderme”, ha asegurado Villarejo, que ha vuelto a atribuir al ex jefe del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Félix Sanz Roldán, su estancia en prisión, un tiempo, ha dicho en tono irónico, “de meditación” para “pensar sobre el bien y el mal”.
“Soy comisario de Policía y he tenido el honor de trabajar para mi país, y digo lo de siempre: las cloacas no generan mierda, la limpian”, añadió.
Preguntado por la situación del Rey emérito, dijo que le parece “injusto” todo lo que le está ocurriendo, aunque no quiso “entrar en ese tema”.
José Manuel Villarejo
Ex comisario
Me han tenido preso, para que no hablara (...) las cloacas no generan mierda, la limpian”