LAS 24 HORAS, SEGúN 'UN VETERANO': CARLOS ARIMóN
Este madrileño participa en esta prueba desde 2014. Le enamora el circuito del Nordschleife porque "aunque vayas con el pie a fondo nunca llevas el volante derecho. Además, en ocasiones pasas muy cerca del guardarraíl o te encuentras con curvas ciegas en las que no ves qué viene a continuación". ¿El tramo más complicado? "Quizás el que va del Hohe Acht a Pflanzgarten –ver mapa, en pág. 23–; es díficil coger la velocidad adecuada en cada curva".
Carlos señala que el 'secreto' de la pista es "atacar al máximo en las zonas rápidas" y que pilotar allí de noche "es especial: ves fuegos artificiales, el humo de las barbacoas...". Eso sí, sin luz, "es esencial saber gestionar el tráfico y entender si las luces de detrás te están alcanzando y a qué ritmo". Por último, destaca que, "si llueve, te encuentras zonas que resbalan mucho y los cambios de adherencia de una curva a otra son bestiales".