ASí SERá SU NUEVO SUPERDEPORTIVO
Aunque aún no se conocen demasiados detalles sobre el AMG Project ONE – que amenaza con dejar a los que serían sus grandes rivales, McLaren P1, Porsche 918 Spyder y Ferrari LaFerrari, a la altura del betún–, ya sabemos que el motor de este superdeportivo híbrido será un 1.6 V6 sobrealimentado que derivará del que usó Lewis Hamilton en la temporada 2015 de F1. Eso sí, su durabilidad será escasa: aproximadamente 50.000 kilómetros – después, la mecánica tendrá que ser reconstruida–. Este propulsor, situado en posición central trasera longitudinal, estará asistido por dos motores eléctricos: el primero tendrá 107 CV y su único objetivo será mantener permanentemente la presión de soplado del turbo; el segundo, con 161 CV, estará unido al cigüeñal y asegurará que la respuesta sea siempre instantánea.
La caja de cambios será automática secuencial, tendrá un único embrague y ocho velocidades. Además, el modelo contará con otros dos motores eléctricos en el eje delantero que, en función de la situación, serán capaces de mover el vehículo por sí solos, ofreciendo una autonomía de hasta 24 kilómetros gracias a unas baterías derivadas de las del Fórmula 1. Se espera que los cinco motores ofrezcan, en total, una potencia combinada de más de 1.000 CV –aunque se rumorea que es posible que llegue a alcanzar los 1.200 CV–. También dispondrá de frenos cerámicos en las cuatro ruedas.
Pero, ¿cuándo podremos disfrutar de él? Probablemente antes de que finalice el año: se especula que será presentado en el Salón de Frankfurt – del 14 al 24 de septiembre–. Respecto a su precio, rondará los 3 millones de euros, aunque las 275 unidades que se van a fabricar ya están vendidas desde hace tiempo.
que había funcionado muy bien entre el público durante las campañas de pruebas y, además, por otro de los rasgos que mejor le caracterizan: “es un muy buen comunicador; sin duda, la persona perfecta”, afirmó Eileen Wunderlich, portavoz de Chrysler por aquel entonces. Según los expertos, sin necesidad de acudir a una sola clase de interpretación, el alemán ofreció un excelente rendimiento como actor: en sólo dos días y medio grabó todos los anuncios de televisión –algo que suele llevar semanas– y tardó sólo 23 minutos en grabar las cuñas de radio… ¡tanto en inglés como en español!
Irónicamente, fue el mismo Zetsche quien, en junio del año 2007, decidió llevar a cabo la escisión de Daimler y Chrysler. La medida fue un golpe maestro del nuevo ejecutivo: conseguía dinero fresco y se desprendía de una compañía que sólo dos años después se declaraba en quiebra.
Otra de las grandes medidas adoptada por Dieter fue la designación, en 2008 –año en el que fue premiado por los medios de comunicación alemanes como el “Mejor Empresario del Año”–, de Gorden Wagener como jefe de diseño del grupo. Wagener era un profesional que había desarrollado su talento en el Royal College of Art de Londres. En menos de un año, el diseñador puso en marcha la nueva filosofía del grupo –a la que bautizó como “claridad sensual”–, destinada a dar a los coches una nueva imagen, agresiva, ju- venil y moderna, para conquistar lo que él llamó la generación Z –compradores nacidos después de 1995–. Según Wagener, el código genético de un icono depende en un 20% de su diseño. “Nosotros no vendemos coches, vendemos sueños”, dijo el diseñador al afirmar que los nuevos modelos AMG GT cumplían con todas las condiciones para convertirse en iconos –como así hicieron, batiendo récords de ventas–.
moers es un hombre amg
Ahí es donde entra de nuevo Moers en escena. Y es que, el trabajo conjunto y en equipo es parte fundamental del éxito de ambas compañías. En septiembre de 2013, Moers se convirtió en jefe ejecutivo de AMG GMBH, sucediendo a Ola Källenius. Thomas Weber, miembro del Consejo de Administración de Daimler AG dijo de él en ese momento que “Tobias Moers tiene gasolina en sus venas. Con su experiencia como técnico y su entusiasmo por los automóviles de alta gama ha hecho una gran contribución para el éxito de nuestra marca durante las últimas dos décadas. Él es, en todos los aspectos, un hombre AMG”.
Su aportación al proyecto ONE ha sido definitiva. “Llamé a Andy Cowell, responsable de motores de altas prestaciones de Mercedes y le pregunté si era posible”, explicó en una ocasión. “Dame dos meses”, me contestó. Finalmente, la respuesta fue positiva.
Moers tiene claro que este proyecto es más que un simple deportivo: “no es cuestión de hacer un hiperdeportivo más, hay que hacer algo único, que determine nuestra superioridad como marca. Sí, es un hiperdeportivo de calle, un regalo que nos hacemos por nuestro aniversario, pero también se trata de un ejercicio sobre cómo vemos nosotros el futuro de las altas prestaciones”. ¿El objetivo? “Nuestro compromiso está con la sofisticación, la eficiencia y la practicidad. Por eso, optamos por un motor V6 de 1.6 litros junto con dos propulsores eléctricos. Hemos aprendido mucho del SLS e-drive a la hora de utilizar la electricidad en un superdeportivo. Ahora, es el momento de aplicar todo ese conocimiento en un coche”.
Tanto Zetsche como Mores tienen siempre la vista puesta en los retos que la industria habrá de afrontar en el futuro próximo: el primero apuesta por el coche conectado y la conducción autónoma, aunque advierte de que “será imprescindible crear un marco legal adecuado”. Por su parte, Moers aseguraba que “habrá un vehículo eléctrico puro Mercedes-AMG, pero no sé aún cuando. Y lo habrá porque, de lo contrario, AMG desaparecerá como marca”. Los que le conocen afirman que es brutalmente honesto. Por ello es conveniente tomarse muy en serio sus palabras.
Habrá que estar muy atentos a los pasos de ambos: es posible que en sus manos esté el futuro del automóvil.