GARAJE EVO
El Audi RS 3 es uno de los compactos más rápidos que hay en el mercado. Este mes por nuestro garaje ha pasado la versión Sedán y, pese a sus 4,47 metros de largo, no pienses que es una aburrida berlina para viajar con la familia; de hecho, si abres el mal
Recordamos el Renault Twingo R.S y probamos el RS 3 Sedán
Por nuestra redacción pasan más de 300 coches cada año. Normalmente, los más emocionantes, novedosos y alucinantes acaban analizados a fondo en las páginas de , sin embargo, no hay hueco para todos. Pero eso no quiere decir que los restantes no merezcan la pena ser disfrutados. En esta sección encontrarás los que, por una razón u otra, nos han proporcionado gratas sensaciones al volante.
AVECES, LA GENTE tiende a pensar que determinados sistemas son más una estrategia de marketing que algo realmente necesario. Sin embargo, esto no es desde luego el caso del Audi RS 3 Sedán. Los 480 Nm de par máximo y los 400 CV que entrega su motor 2.5 Turbo serían capaces de poner en apuros al mejor sistema de tracción a dos ruedas; y más aún cuando vas por una carretera húmeda y hasta con un poco de barro por culpa del paso de Ana, la última ciclogénesis explosiva que ha cruzado la península ibérica. El termómetro exterior marcaba 4,5 grados, y ahí estábamos el RS3 y yo, tratando de comprendernos por una de esas preciosas carreteras que tenemos por la sierra norte de Madrid y Guadalajara.
Voy con el modo Dynamic –el más deportivo de los cuatro disponibles– conectado, y cada vez que salgo de una curva en segunda o tercera velocidad, acelero a fondo para poner a prueba no ya la demoledora respuesta del RS3, sino la forma con la que la transmite al suelo a través de su sistema de tracción total.
Los Pirelli PZero son blanditos y también parecen poner de su parte, pero impresiona bastante comprobar cómo trabaja el sistema de tracción Quattro en cuanto acelero a fondo. Al principio, parece que el eje delantero quiere escurrir un poco, pero entonces notas sutilmente que empieza a llegar un poco más de fuerza al eje trasero, lo justo como para que éste comience a empujar hasta insinuar un leve redondeo que, sin embargo, nunca llega a completar ni tan siquiera una leve derrapada.
Ese es uno de los aspectos que más se puede criticar de este RS 3: que el sistema es tan efectivo que llega con una naturalidad pasmosa a ese punto en el que podría producirse un poco más de deslizamiento, pero justo ahí te dice que ya está bien de juerga por hoy...
Por lo demás, el RS 3 es un auténtico aparato teniendo en cuenta lo que corre, pues sólo necesita 4,1 segundos para pasar de 0 a 100 km/h. Sin embargo, también es un coche que siempre, o casi siempre, acabarás conduciendo tan sólo en el modo Dynamic, pues en los demás no sentirás grandes diferencias con respecto a llevar, por ejemplo, un Audi A3 2.0 TDI.