Un privilegio de trabajo

TODAS LAS PERSONAS QUE PARTICIPAMOS en la elaboración de esta revista somos unos privilegiados. La razón es que nuestro trabajo nos apasiona. Es evidente que, como todos, tiene sus momentos tediosos y, aunque pueda parecer lo contrario, te puedes llegar a aburrir en una sesión de fotos, documentándote para realizar un reportaje, sufriendo el enésimo retraso en un aeropuerto lejos de casa, o haciendo llamadas para enriquecer con declaraciones algún tema.

Pero te aseguro que esos momentos de tedio son los menos. Aquí disfrutamos de experiencias únicas que, como buenamente podemos, tratamos de trasladar a través de estas páginas para que vosotros, lectores, gocéis como nosotros de todo lo que conforma el mundo del automóvil.

Y, por supuesto, dentro de esta profesión, a veces nos toca acudir a eventos únicos; esos en los que tienes que pellizcarte para creértelo. En mi caso, a uno de ellos acudí hace bien poquito y está relacionada con la foto del ‘toldo’ que tienes más abajo. Contemplar el alerón de un Porsche 911 GT3 RS desde esa perspectiva es algo para recordar. Es arte. Y si a eso añadimos que esa instantánea está tomada en el pitlane del circuito alemán de Nürburgring, te puedes imaginar que estuve un buen rato disfrutando del momento. No te digo nada cuando un piloto de la marca viene con una llave y te dice: “este verde es bonito, pero el tuyo es el amarillo de allí al fondo; le hemos puesto neumáticos nuevos”.

El resto te lo cuento a partir de la página 70, pero sólo te puedo decir que hacía tiempo que no me lo pasaba tan bien al volante de una máquina. Y estas sensaciones se repiten en la comparativa del exclusivo Toyota Yaris GRMN y el Mini Cooper S, en el duelo entre el BMW M5 y el Mercedes-AMG E63 S e, incluso, en las pruebas de enormes todocaminos como el Lamborghini Urus, el BMW X5 M o el Porsche Cayenne.

Tenemos suerte, y nuestra única obsesión es que te montes dentro de los mejores automóviles del planeta para que, en la medida de lo posible, se te pongan los pelos de punta como a nosotros. Ah, una última cosa: arriba a la derecha tienes un código QR con un vídeo apasionante que dura alrededor de 7 minutos. Seguro que te gusta.