2 El calendario
La metamorfosis de concept a coche de producción implica un montón de estadios intermedios.
El lanzamiEnto dE un cochE suElE sEr la culminación de un proceso de seis años que comienza con una idea, florece en un universo digital y se propaga en el mundo tenebroso de los prototipos de desarrollo. Utilizando el nuevo Bentley Continental GT como ejemplo, vamos a detallar los distintos tipos de coches involucrados en el proceso de desarrollo de un modelo y qué función desempeñan.
Pero antes de eso, ten en cuenta que los bocetos iniciales y los prototipos digitales se empiezan a crear en el segundo año de desarrollo del modelo, tras invertir un año en la definición del concepto, de las necesidades, los rivales y las exigencias del mercado. Hacia el tercer año se echan a rodar los primeros prototipos digitales, acumulando miles de kilómetros virtuales antes de que las ruedas auténticas se pongan a girar. Ese mismo año –y cuatro antes de que el producto esté listo para llegar a los concesionarios–, se llevan a cabo los primeros test sobre vehículos reales. simuladorEs (años 3 y 4) Los simuladores son lo que normalmente llamamos muletos. Ya sabes a lo que me refiero… la típica berlina de lujo modificada bajo la que se esconde el chasis y las suspensiones del próximo superdeportivo. Estos son los mutantes; los coches Frankenstein. En el caso del Continental GT, Bentley compró 25 Panamera de desarrollo – coches que Porsche había usado hacia el final del desarrollo del Panamera– y contrató a una empresa especialista que se encargó de quitar un buen pedazo de la batalla para convertirlos en algo lo más parecido posible a un Conti GT. Equipados con un motor Bentley que se atornillaba por primera vez en la historia a la caja PDK, comenzaba la gestación física del Continental GT. PrototiPos (años 4 y 5) Una vez completada la fase de prototipos digitales, con los simuladores cubriendo miles y miles de kilómetros y el diseño exterior prácticamente congelado, llegamos al punto en el que comienzan a verse rodar los primeros prototipos. En estos momentos faltan entre dos y tres años para llegar al mercado. Normalmente, los prototipos no se dejan ver en público… y cuando lo hacen van cubiertos de paneles falsos para evitar que trasciendan sus proporciones. Estos coches se han montado a mano y, por lo tanto, son extremadamente caros – estamos hablando de millones de euros–. Las técnicas de diseño digital están reduciendo dramáticamente la cantidad de coches necesarios. Por ejemplo, para el Conti GT se construyeron 25 prototipos… aunque en el caso de vehículos más populares se suele recurrir a flotas más numerosas. PrE-ProducciÓn (años 5 y 6) Alrededor de dos años antes del lanzamiento de un modelo, comienzan a construirse los primeros coches en una primitiva cadena de montaje, utilizando las herramientas o tooling que se emplearán en la cadena definitiva. En el Grupo VW se les conoce como VFF –Vorserien Freigabe Fahrzeug– o unidades pre-serie. Llegados a este punto, la mayor parte del trabajo de la ingeniería ya se ha completado, pero aún quedan por resolver un montón de detalles. Estos son los coches que puedes ver circulando por carreteras y autopistas de todo el mundo, y en los climas más severos, luciendo esos camuflajes de curvas y remolinos que tienen como objetivo disimular las auténticas formas y proporciones del coche.
Durante esta fase se suele construir también un VFF ‘de referencia’, que normalmente se va actualizando con piezas nuevas a medida que se perfeccionan. Según progresa el proceso, cuando faltan alrededor de 12 meses para el lanzamiento, estos son sustituidos por los PVS – Produktions Versuchs Serie; vehículos de producción experimental–. Llegados a este punto, los cambios suelen ser mínimos, y habitualmente consisten en pequeñas mejoras en la calibración de las centralitas, ajustes en los cordones de sellado de las puertas y puesta a punto del sonido de escape.
Las unidades finales de desarrollo se conocen como unidades cero, y deberían ser representativas del coche definitivo. Es entonces cuando la evolución del automóvil se congela, y comienzan a fabricarse miles o millones de copias idénticas. A pesar de ser idénticos a los coches de los concesionarios, los coches cero nunca se venden. A menudo se utilizan como vehículos de pruebas en presentaciones internacionales y para formación en concesionarios… y prácticamente todos acabarán sus días o protagonizando ensayos de choque o achatarrados, ya que legalmente no pueden venderse… incluidas las unidades cero del Bugatti Chiron.