CON EL SENNA EN SU HÁBITAT NATURAL
Resulta increíble sobre la carretera, pero es en los circuitos donde verdaderamente yacen los talentos del Senna.
hemos sobrepasado el punto de no retorno. si 'la jodo' ahora mismo con la frenada, estamparé el coche contra la barrera; no hay forma de evitar este alarmante hecho. pero lo estoy haciendo bien. Ya había conducido el prototipo del senna en el circuito británico de silverstone, así que conozco el potencial de los frenos, y me consta que sus capacidades de frenado son diferentes a las de cualquier otro coche de calle que haya antes conducido. unas capacidades nacidas de una combinación de carga aerodinámica inaudita, neumáticos tan pegajosos que se marcan sólo con la presión del pulgar, y unos frenos cerámicos cuyo proceso de producción es casi tan largo como el de un embarazo humano. sé que el senna se detiene desde muy alta velocidad como si se adentrara de cabeza en una fábrica de pegamento. ¡lo sé! pero grito en pensamientos hacia la sensible parte de mi cerebro que ahora mismo se cuestiona mi cordura cuando el letrero de 200 metros se acerca hacia mí a 300 km/h.
en la vuelta anterior pisé el freno con fuerza a 300 metros. Creí que estaba frenando peligrosamente tarde, pero después me sentí estúpido, ya que tuve que acelerar de nuevo para alcanzar la curva de final de recta del circuito portugués de estoril. esta vez, aunque cada músculo de mi pierna se contrae para desobedecer a mi cerebro, mantendré el pie en el acelerador hasta los 200 metros. sí, lo haré.
Es esta re-evaluación la que puede definir lo que es conducir el senna en circuito. Ciertamente, decelera de 300 km/h a 65 km/h en sólo 200 metros –y en menos, incluso–. la segunda curva requiere de mi valentía y precisión para levantar el freno justo entrando a la misma, permitiendo que el coche pivote y encare la salida acelerando mientras mantengo algunos grados de contravolante. después, hay una gran frenada en la curva 3, y la salida de ella es cuesta arriba. este punto es el único en el que aprecias algún signo de intervención del esp latente, y sólo si no eres preciso con el acelerador.
es la curva 5 la que ilustra la extraordinaria cantidad de carga aerodinámica disponible. antes, rondando con un mclaren 720s, esta curva rápida a derechas requería aflojar un poco y pasar en cuarta marcha aguantando la respiración. es una curva incómoda, que prueba la entereza que estás preparado para mostrar. Con el senna pasas en quinta marcha acelerando ‘a tabla’, como si estuviese unido a un monorraíl. la delicadeza de la dirección se refleja aquí en la estabilidad del coche.
también sientes esa carga aerodinámica al final de la vuelta, en la apropiadamente nombrada parabólica ayrton senna, una rápida curva a derechas que se hace eterna. además, tanta carga aerodinámica no es a costa de la ajustabilidad del vehículo, pues cualquier leve subviraje puede reducirse mediante minúsculas alteraciones en el acelerador.
dicho todo esto, una cosa que apenas he considerado es la potencia del automóvil, a pesar de que es lo suficientemente rápido como para aplastar tus órganos vitales contra la parte posterior de la cavidad de tu pecho cuando aceleras. un coche de 800 CV y, sin embargo, su velocidad en línea recta es casi un valor adicional. no es ni mucho menos su parte más impactante, y eso te dice todo lo que necesitas saber sobre cómo es pilotar el senna en un circuito.
DECELERA DE 300 KM/ H A 65 KM/ H EN SóLO 200 METROS