MERCEDES-AMG 4.0 V8 BITURBO
El V8 biturbo contemporáneo más asombroso
Si bien es cierto que, hace una década, los motores turbo no despertaban mucha ilusión – salvo, tal vez, por unas cifras de prestaciones elevadas que se obtenían a costa de dilapidar el tacto deportivo y el agrado de conducción–, hay que reconocer que las cosas han cambiado, y que actualmente convivimos con una hornada de motores turbo de gran cilindra- da con calidad suficiente como para entrar en esta selección. Pero... ¿cuál escoger de entre todos?
Inicialmente, gran parte de la redacción se decantaba por el 4.4 V8 biturbo de BMW. Y existen buenos argumentos: BMW inventó el concepto de ‘V caliente’ – con los dos turbos montados entre las bancadas–, y las versiones de Motorsport utilizan un colector de admisión entrecruzado muy sofisticado y que proporciona un tacto a altas vueltas muy deportivo. Sin embargo, el motor 4.0 V8 biturbo de AMG lleva demasiado tiempo levantando la mano y preguntado ‘¿y yo?’ como para seguir ignorándolo.
Por supuesto, la razón de haberle escogido no ha sido su mera existencia o su insistencia, sino su calidad. Es cierto que no tiene la rabia del motor de BMW... pero hace todo lo demás increíblemente bien.
Es un motor ligero y compacto. Gasta poco; al menos, cuando se le conduce a ritmos normales y no es necesario refrigerar sus culatas rociando gasolina extra a gogó. Empuja con una furia endiablada desde 3.000 rpm, y además lo hace sin altibajos y con un excelente tacto de acelerador. Suena realmente bien a pesar de ser biturbo – esto no es precisamente mérito del motor, pero el caso es que brama como los ángeles–. A pesar de sus ‘escasos’ 4.0 litros, ofrece cifras de prestaciones deslumbrantes. Y es capaz de brillar con fuerza tanto dotado de cárter seco y montado en posición ultra baja a bordo de un AMG GT R de 585 CV como propulsando un navío como un AMG GT 63 S de cuatro puertas y 2,1 toneladas... – y entregando nada menos que 640 CV–. Esta versatilidad es lo que le ha permitido imponerse al BMW... y a sus rivales de Audi, Porsche y Ferrari.