AUDI RS Q8
Con 600 CV y 800 Nm, el SUV de Audi equipara su potencia a la de los RS 6 y RS 7.
SI PIENSAS QUE ES ABSURDO, es probable que también creas que lo son los Bentley Bentayga Speed W12, Lamborghini Urus y Porsche Cayenne Turbo S E-Hybrid, que ofrecen 635, 650 y 680 CV respectivamente en un formato muy similar al de este Audi RS Q8; de hecho, suspensiones neumáticas, estabilizadoras activas, dirección integral, tracción total y otros vanguardistas componentes y sistemas se benefician de las sinergias inherentes a su plataforma común MLB Evo.
Te guste o no, lo cierto es que, en vivo y en parado –aún no hemos podido conducirlo pero sí tocarlo y hablar con sus creadores–, el nuevo SUV ultra-deportivo de Audi consigue impresionar.
Sus aletas no están muy ensanchadas –apenas 10 milímetros cada una de las delanteras y 5 mm las traseras–, pero el kit aerodinámico de la carrocería y las llantas de 23 pulgadas te predisponen a pensar que hay algo muy serio bajo el capó de este Q8. En realidad, las ruedas de serie son de 22”, pero el vehículo que tenemos delante monta las opcionales, que solo en este caso cuentan con neumáticos más anchos en el tren trasero.
El alerón, nos cuentan, es completamente funcional, necesario para generar las fuerzas descendentes que garanticen la estabilidad cuando circulemos a 305 km/h. Esa es la velocidad máxima si montamos el paquete dinámico. Sin este extra, el limitador queda fijado en ‘solamente’
250 kilómetros por hora. Según un ingeniero con el que tuvimos una amigable charla, estuvieron probando un prototipo sin limitación que alcanzaba 317 km/h, pero los neumáticos sufren demasiado a esa velocidad, y hay que tener en cuenta que estamos ante un SUV cuya masa máxima ronda las 3 toneladas en orden de marcha.
Así, bajo el capó encontramos el V8 4.0 que Audi monta también en los RS 6 y RS 7 Sportback, con 600 CV y 800 Nm, acoplado, mediante convertidor de par, a una caja de cambios automática de engranajes epicicloidales y ocho velocidades en cuya carcasa se integran el diferencial central autoblocante Torsen y el árbol de transmisión que reenvía par al tren delantero, ya que, por supuesto, este SUV dispone de tracción total. Es más, conserva incluso un programa off-road en su interfaz de modos de conducción, aunque si queremos disfrutar del RS Q8 fuera del asfalto, resulta prácticamente imprescindible optar por los muelles neumáticos, que nos permitirán disponer de altura variable en hasta 9 centímetros y elevar, así, la carrocería lo suficiente para que su altura libre al suelo permita la circulación por caminos.
Sí es de serie el sistema de dirección activa en el tren trasero. No obstante, si queremos disponer del diferencial trasero activo y las barras estabilizadoras activas, tendremos que hacernos con el paquete dinámico, que se completa con los frenos carbono-cerámicos. Y es que de serie el RS Q8 cuenta con discos de freno de acero y pinzas de 10 pistones en el tren delantero, si bien el equipo carbono-cerámico opcional no solamente permite ‘liberar’ una mayor velocidad máxima y contar con una frenada más potente y resistente a la fatiga, sino que hace posible ahorrar 12 kilos, una cifra muy importante cuando hablamos de masas no suspendidas.
Disponible a lo largo del primer cuatrimestre de 2020, el Audi RS Q8 comenzará a venderse en Alemania a un precio de 127.000 euros y llegará a nuestro mercado con etiqueta Eco, gracias a su sistema de hibridación ligera.
LAMBORGHINI , PORSCHE Y BENTLEY TIENEN AHORA UN NUEVO ENEMIGO EN CASA