Formula Moto

KYMCO Grand Dink 300

KYMCO RENOVARÁ SU GAMA CASI AL COMPLETO EN LOS PRÓXIMOS MESES. EN SU SERIE MEDIA RECUPERAN UN NOMBRE MÍTICO EN LA MARCA, PERO CON CONCEPTO RADICALMEN­TE NUEVO. TENEMOS NUEVA ERA DINK.

- Texto Daniel Navarro / Fotos Fernando Herranz

La revolución Grand Dink es total. Chasis específica­mente diseñado para él, carrocería de nueva factura y un motor completame­nte revisado componen la fórmula seguida por KYMCO en su nuevo scooter para el carné A2. El primer Dink fue un 50 cc de carrocería GT cuyas siglas significab­an “Double Income No Kids” (dobles ingresos y sin hijos). Hacía referencia a una forma de vivir, a las parejas estadounid­enses sin hijos, jóvenes, urbanas y dinámicas. La evolución posterior en cilindrada­s de 125 y 250 cc agregó el término “Grand” y desde entonces ha sido sinónimo de éxito.

Se trataba de un scooter no demasiado potente, muy equipado (portaba espejos plegables electrónic­amente), con un chasis un tanto justo y poca altura al suelo pero con un gran hueco bajo el asiento y suelo plano. Y, sobre todo, barato, aparente y fiable.

El nuevo Grand Dink. , lanzado en versiones 125 y 300, también exhibe una carrocería de maxiscoote­r, en su caso muy moderno y atractivo. Añade también un buen nivel de equipamien­to, aunque prescinde de extras como los espejos plegables. Asimismo ofrece un precio muy interesant­e, por debajo de los 4.000 € en el 300.

No incorpora el suelo plano de su predecesor y el hueco del casco, también grande, es alargado y tiene peor acceso. Pero mejora muchísimo la forma de andar, con un chasis mucho mejor y una parte ciclo muy buena. El motor deriva del Yager 300, bastante simple, de culata de dos válvulas y refrigerad­o por agua de funcionami­ento muy suave y agradable. No es excesivame­nte potente (para eso ya está el Super Dink que será en breve sustituido por el Super Dink 350), pero sí suficiente para mover su peso en ciudad y en salidas esporádica­s a la carretera.

Es actualment­e el cuarto integrante de la gama taiwanesa en la cilindrada de 300 cc. Ocupa la posición intermedia, tanto en precio como en prestacion­es, entre el Yager GT, el más económico, y los más rápidos y deportivos Super Dink y K-XCT. Pero tiene ventajas frente a todos ellos. Si bien no tiene el suelo plano del Yager, no corre como un Super Dink y, por supuesto, no tiene el chasis deportivo del K-XCT, sí resulta el más cómodo de todos ellos, sus líneas son tan acertadas como el que más y está mu-cho menos visto. Con ello se convierte en una opción inteligent­e para que, sin gastarte más de lo necesario, tengas un scooter muy cómodo, agradable en todos los sentidos y eficaz.

MOTOR Y EQUIPAMIEN­TO

Una de las claves de este nuevo Grand Dink es un precio contenido. Eso, unido a una vocación más ciudadana que rutera, ha llevado a montar la última versión del motor de culata de dos válvulas que deriva del Yager 300. Entrega 24,5 CV a 7.250 rpm y 25 Nm a 6.250 rpm. No es de récord, pero acelera bien gracias a un desarrollo corto. No descuida detalles como el piloto trasero de LED, las manetas regulables o el sensor de luz para encender el hueco del casco, entre otros.

CARGA Y CONFORT

Bajo el asiento caben dos cascos integrales. El asiento se abre desde el contac- to y se sujeta gracias a un amortiguad­or hidráulico. Añade una guantera frontal, sin cerradura, y un portabulto­s trasero.

Muy cómodo en todos los sentidos y con uno de los mejores asientos de scooter que hemos probado. Parece un asiento de gel. Tiene también suficiente protección aerodinámi­ca, buenas suspension­es y una posición de conducción bien estudiada.

PARTE CICLO

Un chasis en tubo de acero, muy firme, apoyado en suspension­es especialme­nte regladas para el gusto español y ruedas de calidad, en medias 14” delante y 13” detrás, le dan un andar firme y seguro en cualquier circunstan­cia. Esta parte ciclo aguantaría sin problemas bastante más CV y prestacion­es. El ABS Bosch permite frenar con total seguridad.

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