SONRISA DIABOLICA
La estrella de es el terrorífico ente que adopta la forma de Pennywise, un payaso al que encarna Bill Skarsgård. Me llamó la atención su energía, su presencia. Incluso sin maquillaje ni nada. Cuadraba perfectamente con la primera visión que tuve del personaje, cuenta el director: Una cualidad casi infantil y, por otro lado, una oscuridad ancestral e imprevisible. El rol se aleja, conscientemente, del que interpretó Tim Curry en la versión para TV. No quería reinventarlo porque sí, explica Muschietti: Me pareció que había algo en la esencia del personaje del libro que faltaba, ese punto imprevisible, del depredador que juega con su comida hasta que dice basta. El horror no viene sólo de sus transformaciones o de los ataques con los que tortura a sus víctimas, sino de un equilibrio extraño. A Pennywise llega un momento en el que no le importa si le crees o no. Un instante en el que deja de jugar y se convierte en un pervertido, en una bestia que mata... de miedo.