Detroit. El regreso de Kathryn Bigelow.
Los disturbios raciales de julio de 1967 sirven a Kathryn Bigelow para realizar un extraordinario y coral fresco de aquellos terribles días en ‘Detroit’, un terrible retrato filmado con su nervio habitual y con todos los números para dar que hablar en los
“CUANDO ELIGES UNA HISTORIA REAL, ADQUIERES UNA RESPONSABILIDAD, PERO NO SIGNIFICA QUE TRAICIONES TU PUNTO DE VISTA E IDEOLOGÍA”.
Mark Boal, guionista
Soy yo la persona adecuada, correcta, para explicar esta historia que sucedió hace ya medio siglo? Kathryn Bigelow, la oscarizada directora de La noche más oscura (2012), contes
ta a su propia pregunta: No, pero sí que soy capaz de explicar con honestidad todo lo que pasó aquella noche del 25 de julio de 1967 en el motel Algiers de Detroit. La realizadora, que tenía 15 años en aquellos días, recuerda la sensación extraña de que algo parecido a la guerra estaba sucediendo en casa. Vivíamos Vietnam de una manera muy directa, pero aquellas revueltas raciales y la lista de fallecidos nos tocó mucho. Pese a que los medios de comunicación, sobre todo la televisión, fueron muy partidistas. Justo ahí le quedó el gusanillo de, algún día, narrar lo sucedido.
Tiempo después, prosigue Bigelow,
Mark Boal, que ya había trabajado conmigo como guionista en En tierra hostil
(2008) y La noche más oscura, me comunicó que estaba escribiendo sobre los asesinatos del Algiers, supe que había llegado el momento. Susan Sontag, que fue mi profesora y mentora en la universidad de Nueva York, me inculcó la idea de que la estética y el compromiso social no eran conceptos antagónicos.
LA LARGA NOCHE DE JULIO
Mark Boal había hecho un trabajo de documentación exhaustivo, recurriendo a materiales de la época, pero, principalmente, a los testimonios de supervivientes y testigos. Cuando eliges contar una historia real, señala el guionista, adquieres una responsabilidad,
pero eso no significa que traiciones tu punto de vista y tu ideología: a veces, la ficción te permite ser más real que un documental. Kathryn Bigelow incide en
el tema: Han pasado 50 años y, como cineasta, quieres ser objetiva, aséptica, pero, cuando te entrevistas con quienes vivieron aquellos acontecimientos, sabes que no puedes serlo, no puedes ser neutral. No debes ser neutral.
En esa búsqueda para crear empatía con lo sucedido aquel verano en Detroit, la autora de Le llaman Bodhi (1991) optó por echar mano de su contrastado y
rabioso estilo: Mi intención era hacer vivir en tiempo real y en primera persona todo lo que pasó. El uso de una cámara nerviosa, que no se está quieta ni un momento, no sólo era sinónimo del caos en las calles de una ciudad en estado de sitio, sino la forma en la que el espectador se mete en la piel de los protagonistas. No quiero que los actores actúen ante la cámara. Quiero que trabajen como si estuvieran en una obra de teatro, y buscarles yo con mi mirada, con el objetivo y el encuadre.
LA JAURÍA HUMANA
Anthony Mackie, el Halcón del universo cinemático Marvel, y también el sargento Sanborn de la oscarizada
En tierra hostil, ya conocía la manera de trabajar en un rodaje de Kathryn Bigelow: Ella te invita a explorar cada escena por separado, a improvisar. No trabajas con un guion cerrado, sino que cada jornada te explica de qué va la escena y te deja que la construyas dentro
de lo que representa. El resto de actores se encontraron con este método tan particular, pero lo asumieron con energía y entusiasmo. Es el caso de Algee Smith (de la teleserie Army Wives), el descubrimiento del film, que encarna a Larry Reed, primer vocalista del grupo The Dramatics: Kathryn me llevó a un juego de improvisación emocional muy fuerte en el que todo acabó fluyendo,
desde la música al sufrimiento y la tortura, el dolor. John Boyega (el Finn de la nueva trilogía Star Wars) es Melvin Dismukes, un guardia de seguridad pluriempleado, un hombre decente, describe el actor, en el lugar y momento equivocados. Dismukes intenta hacer lo que debe, pero será juzgado por todos de una manera muy dura. No obstante, para juicio y rol complicado, el de ese agente de policía racista, Philip Krauss, al que presta su rostro el británico Will
Poulter (El renacido, El corredor del laberinto). No es un personaje real, sino la suma de muchos parecidos, nos infor
ma el actor: Es la esencia del Mal, un Mal muy cotidiano, que es capaz de infectar a los que tiene al lado.
El reparto principal se completa con los afroamericanos Jacob Latimore (Belleza oculta) y Jason Mitchell (Straight Outta Compton), a los que se unen Jack Reynor (Sing Street, Free Fire), la británica Hannah Murray (vista, última- mente, en El Elegido, de Antonio Chavarrías) y John Krasinski (13 horas: Los soldados secretos de Bengasi).
FANTASMAS DEL PASADO
El propósito del arte, supongo, es la agitación y el cambio. Kathryn Bigelow tie
ne claro que el contenido determina la forma. No podíamos hacer una película complaciente y que no molestase. Seguimos viendo en los noticiarios a jóvenes afroamericanos asesinados por policías: en Chicago, Ferguson, la ciudad de Nueva York… Una película como Detroit
(que, en realidad, se rodó en Boston) te obliga a plantearte si de verdad algo ha cambiado desde aquel 1967. En agosto de aquel año se estrenó En el calor de la
noche, de Norman Jewison, ejemplo de cine liberal, antirracista, y oscarizable, pero que sirvió para que la mala conciencia de muchos blancos de mi país se olvidara de la matanza en el motel Algiers. O pensara que era algo anóma- lo que no iba con ellos. Uno de los valores de mirar al pasado es ver el presente desde otra perspectiva. Y, desafortunadamente, nuestro presente sigue siendo una zona de guerra racial de la que nos gustaría desentendernos.
ESTRENA: 15 SEPTIEMBRE
KATHRYN BIGELOW (Directora)
Primera mujer en ganar un Oscar a la Mejor Dirección, por En tierra hostil (2008), Kathryn Ann Bigelow (San Carlos, California, 1951) posee una ecléctica filmografía donde destacan títulos como The Loveless, Los Viajeros de la noche, Acero azul, El peso del agua, Le llaman Bodhi, Días extraños o La noche más oscura. DETROIT (USA, 2017, 143 min.). Dirección: Kathryn Bigelow. Intérpretes: John Boyega, Will Poulter, Algee Smith, Anthony Mackie, Jacob Latimore, Hannah Murray, Jack Reynor, Jason Mitchell, John Krasinski. Distribuidora: eOne. DRAMA.
detroit.movie
“LA CÁMARA NERVIOSA ES EL SINÓNIMO DEL CAOS DE LA CIUDAD Y LA FORMA EN LA QUE EL PÚBLICO SE METE EN LA PIEL DE LOS PROTAGONISTAS”.
Kathryn Bigelow, directora