EL TINDER DE NOA
√ Esperaba más de la nueva colaboración entre Ian McKellen y Bill Condon. Tanto Dioses y monstruos como Mr. Holmes me parecieron dos películas espléndidas, y dos trabajos de altura del intérprete británico. Sin embargo, La gran mentira está muy por debajo del talento de ambos (del de Helen Mirren también): un thriller la mar de sobado con un bochornoso giro final.
Capitán Mauser (retirado) (Alcobendas). √ Como en los viejos tiempos, La gran mentira vale lo que vale tener el placer de ver a dos monstruos de la interpretación como Helen Mirren e Ian McKellen frente a frente. Tendrá la historia agujeros de guion, sorpresas que no lo son tanto y un epílogo de esos que tenemos que sufrir en estos tiempos del #MeToo, pero esta pareja salva no solo los muebles, sino la victoriana mansión entera.
Xabier Birregui (vía e-mail). √ Es La gran mentira algo más que una trama de estafadores y estafas perfectas, y justo ahí reside su originalidad. Es una historia de venganza que se toma su tiempo en desvelarse y que mira en ese ejercicio de memoria vindicativa a la misma historia vergonzante de Europa. Y luego están ellos dos, Mirren y McKellen, enormes ambos, más allá del bien y del mal.
Loreto Ogando (vía e-mail).
CONTESTA MR. BELVEDERE
A mis (incontables) años siempre es un alivio ver que gente de mi quinta como Sir Ian McKellen y Dame Helen Mirren pueden flirtear y pelearse sin sufrir por sus articulaciones. Cierto que La gran
mentira es bastante previsible, pero secuencias como la del asesinato en el metro ya le hacen a uno tener esperanzas en una vejez creativa.