Hirokazu Kore-eda, por La verdad.
Tras ganar la Palma de Oro del Festival de Cannes por la prodigiosa ‘Un asunto de familia’, el realizador japonés Hirokazu Kore-eda se adentra en el cine francés por la puerta grande de la mano de Catherine Deneuve y Juliette Binoche, madre e hija en ‘La verdad’.
Lumir (Juliette Binoche) viaja a París cuando se publican las memorias de su madre (Catherine Deneuve), una estrella de cine. El encuentro terminará convirtiéndose en un ajuste de cuentas.
El drama familiar, un género universal. En La verdad, el cineasta japonés Hirokazu Kore-eda (Nadie sabe, Nuestra hermana pequeña) asume el desafío de exportar a territorio francés su incisivo y delicado estudio de las relaciones familiares y las dinámicas sociales. Al filmar en Francia, existía la posibilidad de abordar ciertos temas sociales, como por ejemplo, la inmigración, apunta Kore-eda, pero decidí centrarme totalmente en la relación entre una hija, a la que da vida Juliette Binoche, y su madre, interpretada por Catherine Deneuve. Pienso que el funcionamiento de una comunidad se manifiesta en cada relación interpersonal. En La verdad tienes a una madre y una hija que se preguntan qué pueden hacer para superar sus rencillas del pasado, cómo pueden llegar a entenderse y de qué manera afrontar su relación con la mortalidad. Cada uno de nosotros intenta responder a estos interrogantes de fuerte calado existencial con los recursos y conocimientos que nos han transmitido familiares, profesores y amigos. Es lo que cohesiona a una sociedad: esos intercambios, ese aprendizaje común.
De un camerino nipón a una mansión francesa. La verdad transcurre en su mayor parte en la casa propiedad de Fabienne, la actriz a la que da vida Deneuve ( Quise concentrar la acción en la casa familiar para dotar al film de una escala humana, intimista, explica Kore-eda); sin embargo, la idea original era que el relato aconteciese en el interior del camerino de un teatro. Todo cambió cuando en 2011 Juliette Binoche me contactó para proponerme trabajar juntos, revela Kore-eda.
No tenía claro si debía ambientar la historia en Japón o Francia, pero sí sabía que necesitaba a una gran actriz capaz de representar toda la historia del cine de su país. Al rastrear la cinematografía japonesa, no encontré a una intérprete con ese peso histórico; en cambio, al pensar en el cine francés, la respuesta era evidente: Catherine Deneuve. Y, de hecho, Kore-eda no pierde la oportunidad de evocar el pasado artístico del icono galo. En La verdad, se juega con el hecho de que Fabienne (Deneuve) interpretó una vez a una bruja con poderes mágicos, una referencia al film
Piel de asno (1970), de Jacques Demy.
Una diva muy profesional. Deneuve arrastra tras de sí un aura de diva altiva; sin embargo, Kore-eda la describe como una actriz entregada a la causa artística. Mucha gente me comentaba que trabajar con Catherine podía ser complicado, pero no fue así, afirma el director de De tal padre, tal hijo. De hecho, me sorprendió que, durante el rodaje, ella jamás estuvo preocupada de cómo aparecía en pantalla. Nunca pidió consultar el monitor para ver cómo había quedado en tal o cual escena. Su interés pasaba siempre por compartir conmigo y con los demás actores su visión de su personaje para conseguir una buena película, remata el cineasta. Para Kore-eda, el verdadero reto fue de orden idiomático, dado su limitado conocimiento del francés. Durante el rodaje, todo fue bien gracias a la profesionalidad de todo el equipo, tanto técnicos como actores, pero el montaje fue bastante más complicado, ya que necesitaba saber qué decía cada personaje en cada instante. Tuve que pedir que subtitularan todas las escenas para llevar a cabo el montaje con conocimiento de causa.
La conexión americana. Junto a Deneuve y Binoche, por la trama circulan otros actores y actrices de peso, como la francesa Ludivine Sagnier (The Young Pope), una versión joven del personaje de Deneuve en una película de ciencia ficción (dentro de La verdad) que está rodando Fabienne. La otra piedra angular es Ethan Hawke, que interpreta a Hank, un actor en horas bajas que está casado con el personaje de Binoche. Escribí el guion de La verdad en 2015, señala Kore-eda, y en aquel momento pensé en Ethan (Hawke), a quien conocía de la trilogía de Jesse y Celine de Richard Linklater. Se da la circunstancia de que Ethan ha dirigido películas y además se le da muy bien actuar junto a niños, como demostró en Boyhood, así que me pareció una elección perfecta. ESTRENO: 25 DICIEMBRE