Robert Eggers, por El faro.
Tras presentar candidatura a maestro del terror con ‘La bruja’, Robert Eggers redobla la apuesta con otra siniestra mirada al pasado, ahora con Willem Dafoe y Robert Pattinson enfrentados en un viaje a la locura.
En la década de 1890, dos fareros (Willem Dafoe y Robert Pattinson) intentan mantener la cordura mientras conviven en una remota y misteriosa isla de Nueva Inglaterra.
Contra los elementos. Según cuenta Robert Eggers (Lee, New Hampshire, 1983), la idea de El faro germinó allá por 2012, explica a FOTOGRAMAS uno de los talentos más deslumbrantes del joven cine norteamericano, antes de hacer La bruja, cuando a mi hermano (Max Eggers) se le ocurrió escribir una historia de fantasmas ambientada en un faro. Pude imaginar al instante cuál debía ser la atmósfera y la textura visual de la película. Al mismo tiempo, pensé que nunca podríamos sacar adelante una producción tan compleja. La realidad estuvo a punto de darle la razón ya que el rodaje del film, cuyos exteriores se rodaron en el Cabo Forchu (Nueva Escocia, Canadá), se vio golpeado por gélidas temperaturas, ventiscas y lluvias torrenciales. Hubo días en que el rodaje fue duro, admite el cineasta de 36 años, pero más que por las condiciones climáticas, por lo difícil que fue hallar el tono adecuado para la película. Planteada como una inmersión pesadillesca en la compleja relación entre dos fareros a los que dan vida Willem Dafoe y Robert Pattinson, El faro combina el drama psicológico con el terror atmosférico, todo ello filtrado por un humor socarrón. Tuve miedo de que nos estuviese saliendo una película demasiado graciosa, pero encontramos la cara siniestra del film durante el montaje, cuenta. Dos actores en la cumbre. No sería posible imaginar la magnética trama sin la presencia electrizante del dúo Dafoe y Pattinson, que antes del rodaje compartieron una intensa semana de ensayos. Debido a la forma meticulosa en la que mi equipo y yo trabajamos, necesitaba un periodo de ensayos para que los actores encontraran su lugar, aclara el cineasta. Como ambos venimos del teatro, Willem y yo disfrutamos mucho de esos ensayos. Era como volver a Nueva York al teatro independiente, celebra. Sin embargo, Rob (Pattinson) no viene de la escena y le parecían una pérdida de tiempo. Aquella tensión podría haber resultado problemática, pero acabó siendo provechosa porque se generó una dinámica parecida a la que buscaba en la ficción, donde el personaje de Dafoe vive cómodamente
“MI CINE ASPIRA A INVOCAR UNA CIERTA AUTENTICIDAD, PERO MI VISIÓN DEL PASADO ES PERSONAL Y FANTASIOSA”. Robert Eggers, director.
en su faro, mientras que Rob encarna a un hombre que no acaba de encontrar su lugar en el mundo. Más allá de la diversidad de enfoques, los actores demuestran una entrega común a la hora de escenificar la cruda intimidad de los personajes, su brutal lucha contra la naturaleza y su endiablado camino hacia la locura. Se mostraran dispuestos a todo. A Rob le encanta decir que, en más de una ocasión, se meó encima mientras rodábamos (risas). No puedo asegurar que sea verdad, pero no me extrañaría que lo fuese. Regreso al pasado. Tras La bruja, ambientada en la Nueva Inglaterra de 1630, Eggers vuelve a sumergirse en el pasado con esta película en blanco y negro en la que confluyen el imaginario marino de Herman Melville y Robert Louis
Stevenson, los relatos fantásticos de
H. P. Lovecraft y una tragedia real ocurrida en 1801, en la que dos fareros, ambos llamados Thomas, murieron atrapados durante una tormenta. Estoy enamorado no solo del pasado en sí, sino del propio proceso de investigación de ese pasado, sostiene Eggers. Porque te das cuenta de hasta qué punto nuestra vida está marcada por el contexto social. En El faro, necesitaba que los personajes hiciesen referencias a su sexualidad. Pero, claro, dos hombres en la América de 1890 no hablaban sobre sexo como lo hace hoy en día Donald Trump. Para Eggers, investigar el ayer nos ayuda a entender dónde estamos hoy y hacia dónde vamos, un proceso reflexivo de carácter más subjetivo que objetivo: Mi cine aspira a invocar una cierta autenticidad, pero mi visión del pasado es totalmente personal, y en ese sentido muy fantasiosa.
ESTRENO: 10 ENERO