Fotogramas

Jaime Lorente,

- por El Cid (TV).

Sus creaciones de Denver, en ‘La casa de papel’, y Nano, en ‘Élite’, le han aportado fama y dinero, pero siempre pensó que le faltaba algo. Hasta que volvió a asomarse al teatro, a la poesía y, sobre todo, vivió con una intensidad inusitada el papel de Rodrigo Díaz de Vivar, el rol central de ‘El Cid’, una de las grandes apuestas de la ficción española para este año.

Me lo paso muy bien, me gustan las entrevista­s, hay que vender el producto que haces, expresa un Jaime Lorente (Murcia, 1991) especialme­nte ilusionado con el estreno de El Cid, serie española de Amazon Prime Video que rompe su noviazgo con Netflix y con la que dice haber vivido una redención y una paz interior que esperaba desde hacía tiempo. Diez capítulos divididos en dos temporadas que ha rodado seguidas y que ponen un punto y aparte a su carrera.

1. Una cabalgada importante. Mi representa­nte me avisó de que la serie estaba preparándo­se en junio del año pasado y me apunté a los castings. Lo más parecido que había hecho a eso eran las clases de esgrima en la ESAD de Murcia, pero fui con mucha ilusión. Hice ‘postureo’ con la cota de malla y trabajé con Francisco Ortiz (Sancho), Juan Fernández (Rodrigo) y Lucía Guerrero (Jimena). Terminé de rodar La casa de papel y a los cuatro días estaba con la armadura. Fue una ‘cabalgada’ importante, nunca mejor dicho (risas).

2. Sin lenguaje medieval. Desde el principio todos tuvimos claro que El Cid era una película larga de acción, de aventuras, no queríamos una recreación exacta de aquella época ni nada parecido a la famosa película de Anthony Mann con la que no tiene nada que ver y que ni siquiera me gusta demasiado. La serie es moderna, sin lenguaje medieval, avanza con duelos, romance, honor y mucha tensión, y mi interpreta­ción es así, seria e intensa. Aprendí a montar a caballo y a dominar la espada con una armadura de más de 20 kilos y un frío insoportab­le; rodábamos en Soria y no lo he pasado peor en mi vida. Lo hice encantado. Mi pasión es el teatro clásico, con personajes parecidos. He jugado a un código que me apasiona. Yo venía de Nano (Élite) y Denver (La casa de papel) y esto ha sido el gran cambio.

3. Un golpe en la mesa. Me considero una persona formada y me encanta mi oficio, le tengo mucho respeto, así que no quiero ser una imagen o un producto. Me apetecía dar un golpe en la mesa. No soy un macarra de barrio, con todo mi respeto. Puedo hacer otras cosas, como esta ficción, o la obra de teatro con la que estoy, Matar cansa.

4. Rigor profesiona­l. He tenido muy buena relación con los seis directores que trabajan en esta serie y con todos los compañeros. Yo a los rodajes no voy a hacer amigos, pero, si surgen, genial. Muchas veces se generan conflictos por crear relaciones falsas entre los actores, por fingir. Hay que crear buen ambiente y respetar el trabajo de los demás, pero nunca ser falso.

5. Poesía y libertad. La poesía me hace escapar, me abre mundos, me tranquiliz­a y sensibiliz­a. Hace poco recopilé mis poemas en un libro, A propósito de tu boca, y me he pasado todo el confinamie­nto leyendo a Walt Whitman. Es bárbaro, como Leopoldo María Panero o Miguel Hernández, que es casi de mi tierra. ¡Todo lo que esté bien escrito me gusta!

‘EL CID’ SE ESTRENA EL 8 DE DICIEMBRE EN AMAZON PRIME VIDEO

“ME APETECÍA DAR UN GOLPE EN LA MESA. NO SOY UN MACARRA DE BARRIO, CON TODO MI RESPETO. PUEDO HACER OTRAS COSAS”.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain