“BAJAR UNA MONTAÑA A TODA VELOCIDAD ES SENTIR LA LIBERTAD PLENA”
Su estilo es único, y su personalidad aún más. Posiblemente, entre las actrices del panorama actual más versátiles y generosas, Juana Acosta va ampliando su carrera de papeles con huella. Tras las impresionantes críticas por Anna, la última película que protagonizó en Colombia, tiene en cartel El contenido del silencio, basada en la novela de Lucía Etxebarria, y Acantilado, de Helena Taberna, en la que comparte cartel con otra de nuestras protagonistas, Ingrid García Johnson, Daniel Grao y Goya Toledo. Actualmente espera la presentación de Vientos de La Habana, con Jorge Perugorría, y Siete años, con Paco León. Con la primera, adaptación de la novela Vientos de cuaresma de Leonardo Padura, ha trabajado mano a mano con el actor cubano, dando vida a Karina, una joven y bella saxofonista aficionada al jazz que mantiene un romance con el personaje principal (el famoso teniente Conde) mientras investiga el asesinato de una profesora de química. A Juana le gusta la libertad que le aporta rodar, que sólo puede comparar al momento en que se sube a unos esquís: “Bajar una montaña a toda velocidad es una sensación casi incomparable”, afirma. Y aunque dice que desde pequeña en casa siempre se habló de todo sin tabúes, reconoce que le cuesta pronunciarse sobre la muerte. “No sé… tengo