Entre los amigos in vitados, el director deel beso, David Priego
Timing i s c r ucial. Eran las nueve de la mañana y Lourdes se preparaba en su ig lesiacasa de Ruby Street. Sobre su tocador, confesiones en torno a los vestidos eleg idos. “El primero, un traje larg o clásico, de seda y con cola , que evocaba el vestido de mi abuela materna el día de su boda. Después de la comida y para el concierto que dimos, me cambié a un Samantha Pleet, mi diseñadora fetiche, que tenía un estilo años 40, de seda cruda y con una pequeña capa .”
Sobre su marido, Zach, nos cuenta que tienen “la misma forma de estar en la vida. Tenemos los mismos objetivos pero procesos distintos para llegar a ellos. Somos mejores amigos y nos expandimos el uno al otro”. Todos estos cambios: el traslado a L.A., el distanciamiento de su carrera musical, su enlace con Zach... cuenta que la han conducido “al mejor estadio de mi vida hasta la fecha. Siento que he encontrado a un compañero de ensueño y, a nivel individual y creativo, me siento muy libre y capaz de explorar muchos ámbitos”.
No past land. Algunos de estos ámbitos tienen que ver con otras artes por las que ha sentido interés. Como la interpretación. Terreno en el que se adentró con el cortometraje El beso. “La interpretación me ha parecido un paso muy orgánico para trasmitir y evocar las mismas emociones que he trabajado siempre a través de la música, pero en un medio, si cabe, más lúdico donde me he podido deshacer de mi identidad.”
Una identidad a la que aún sigue unida, al igual que a la música. Pues prepara un nuevo disco que recogerá versiones. “Éste es un proyecto que tenía en mente desde hace mucho tiempo, siempre he cantado versiones en mis conciertos y tras una fase Karaoke aquí en L.A. todo se dio para que, finalmente, escogiera unos temazos, los llevara a mi terreno y los grabara.”
Y es que el encanto de L.A. la tiene cautivada. “Es una ciudad que nunca acabas de conocer, es inabarcable y está en constante estado de cambio. Ahí reside su magia. Y en crearte tu propio espacio dentro de ella.” Un espacio que Lourdes puede decir que ha conquistado.