GINGER POWER EMMA WATSON”

Este mes Amy luchará por dejar de ser la eterna nominada a los Oscar y llevarse al dorado hombrecito calvo a su casa, el próximo 26 de febrero. La llegada y la cinta de Tom Ford, Animales nocturnos, son sus boletos ganadores... Si Emma Stone se lo permite. Así lo ha asegurado su publicista y promete que la gira de la actriz para llevarse la estatuilla será de órdago, siguiendo las directrices de Dicaprio que le ha cedido el puesto. Mientras llega su merecido paso a los anales de la historia de Hollywood, en 2017 la podremos de ver como protagonista en la serie de televisón Sharp Objects. femenino del reparto. Incluso tuvo programada una aparición en el programa Today, pero fue cancelada porque se negó a responder a las preguntas sobre el asunto. Por aquel entones Adams no compartía aquella idea y todavía hoy sig ue siendo algo reacia a hablar de ello. Aún así, ahora que las cosas han vuelto a su sitio se muestra más abierta a tratar ciertas cuestiones. A diferencia de Lawrence, quien no supo la diferencia de salarios hasta que leyó unos emails que se filtraron durante un hackeo a Sony, Adams supo de aquella diferencia mucho antes que su compañera. “Negocié e intenté que me pagaran igual que a ellos ( Jeremy Renner y Bradley Cooper), - dice Adams.- Pero sentí que si seg uía insistiendo no tendría la oportunidad de interpretar ese papel.”

Puede que trabaje en la industria del cine, pero Amy Adams no se ha propuesto caerle bien a todo el mundo. “No me sentía cómoda hablando de ello. Y no creo que sea mala actriz por haber actuado de aquel modo. Creo que soy afortunada. Busqué información y vi que por lo general las mujeres no se sienten a gusto cuando negocian sus salarios.” Adams se muestra reacia ante la idea de luchar sólo por su propio privilegio. “Es genial ver lo que Emma Watson (Embajadora de Buena Voluntad de ONU Mujeres) está haciendo en su activismo a favor de las mujeres. No habla solamente de las actrices, lo hace sobre las mujeres de todo el mundo”, explica Amy. Dejando a un lado las reglas del orden de nacimiento, Adams está aprendiendo que tiene más cosas en común con Lois Lane de las que pensaba. “Me limitaba a mantener la cabeza baja y hacer mi trabajo lo mejor posible.” De vez en cuando sus ojos se giran para comprobar si alguien nos escucha. “Pero eso hace tiempo que dejó de servirme. Ahora hablo claro”, termina Adams.

ES GENIAL VER LO QUE CONSIGUE