EL VESTIDO ALBORNOZ

u órgano gigante exhala un aria de Bellini mezclada con Classique y Le Mâle, de Jean Paul Gaultier, dos de las fragancias más sexy de la historia. Un cuarto de siglo después de su lanzamiento, Gaultier sorprende con su campaña más imaginativa. Una troupe de marineros y amazonas encorsetadas flirtean entre los robots y el engranaje de una fábrica retrofuturista. Al frente de las chicas, Daphne Groeneveld (Holanda, 1994). Boca desmedida e insolente y mirada virginal son las coordenadas de su belleza rara. Pero lo raro es no enamorarse de ella. GLAMOUR: Tu apodo en la campaña de fragancias de Jean Paul Gaultier es Sugar Lips. ¿A quién se le ocurrió? DAPHNE: Todos los personajes de la fábrica tienen un apodo: Rubi Ceps, Abdo Minou, K-zanova, Candy Namite, Oscar Face... El mío se nos ocurrió allí mismo, cuando los maquilladores me aplicaron el rojo de labios alguien comentó que me daban un aire sugary (azucarado). Es cierto, recordaban a las piruletas que se regalan en San Valentín. De ahí surgió. GLAMOUR: ¿Cuál es el piropo más bonito que te han dicho alguna vez sobre tus labios? DAPHNE: Un amigo me dijo que parecía una muñeca de porcelana. ¡Me pareció muy dulce! GLAMOUR: El nuevo anuncio es marcadamente retro. ¿Qué época del pasado te inspira más a nivel estético? DAPHNE: Me cautivan mis recuerdos de los años 90, a pesar de que son algo difusos. Recuerdo que las modelos eran mujeres bellas, fabulosas, con mucho carácter y totalmente diferenciadas de la masa. Jean Paul Gaultier exaltó la feminidad de aquellas mujeres de un modo único. GLAMOUR: ¿Por qué crees que monsieur Gaultier se ha fijado en ti como imagen de la campaña? DAPHNE: Él confía en las bellezas raras, diferentes, fuera de los cánones. Es algo que me encanta. Mi amistad con monsieur Gaultier viene de lejos: he trabajado con él durante años en la parte de moda y ahora en fragancias. GLAMOUR: ¿Alguna anécdota del rodaje del anuncio? DAPHNE: ¡La panda Gaultier es un equipazo! En el rodaje hubo muy buen rollo y como el guión no era muy rígido incluso improvisamos en algunas tomas. Por ejemplo, darle a Chris Bunn un cachete en el culo fue idea nuestra (risas). GLAMOUR: En una entrevista de tus inicios confesaste que de niña tu sueño era convertirte en princesa. ¿Crees que hoy tu vida se parece a la de las princesas? DAPHNE: (Risas) ¡Por supuesto que cuando tenía 5 años mi sueño era convertirme en princesa! Más adelante me cautivó la idea de regentar mi propio hotel, plan que aún hoy me ronda por la cabeza... Pero ya me siento como una princesa, me siento “rica” por tener la oportunidad de viajar por el mundo y conocer a gente genial. Cada día de mi vida es distinto al anterior, eso me motiva y me emociona. GLAMOUR: En Instagram compartes fotos de tu vida en Nueva York junto a otras compatriotas como Iris van Berne, Maud Welzen, Sanne Vloet... ¿Se lleva mejor la nostalgia haciendo piña con gente de tu país? DAPHNE: Sííí, ¡adoro a mis holandesas! Es agradable poder charlar en holandés. Son mi familia en la Gran Manzana. GLAMOUR: Sois como una tribu de vikingas en NYC... DAPHNE: Sí, celebramos todas nuestras tradiciones, no se nos pasa ni una : el Día del Rey, San Nicolás... El pasado Día del Rey salimos a tomar algo y bailar vestidas todas de naranja de la cabeza a los pies, ¡fue muy divertido! GLAMOUR: Y con las modelos más consagradas como Lara Stone, Saskia de Brauw, Doutzen Kroes o Bette Franke, ¿también tienes tan buen rollo? DAPHNE: Hemos trabajado juntas, son muy agradables. En las Fashion Weeks es complicado tener una conversación, el ritmo es muy frenético y apenas hay tiempo. Pero en las sesiones de fotos poco a poco hemos ido intimando. Los holandeses tenemos muy buen carácter, es fácil llevarse bien. GLAMOUR: ¿Tu modelo favorita de todos los tiempos? DAPHNE: Lara Stone y Natasha Poly. Creo que son únicas. GLAMOUR: ¿Cuál es la sorpresa más romántica que te han dado por San Valentín? DAPHNE: Nada extravagante: rosas. No necesito nada más. GLAMOUR: ¿Tu plan para un San Valentín perfecto? DAPHNE: Pasar la tarde en Central Park y, luego, ir a cenar a algún sitio romántico y mono. GLAMOUR: ¿Tres prendas que nunca faltan en tu maleta? DAPHNE: Mi cazadora de cuero de Maje, mis vaqueros de Rag & Bone y un bolso. GLAMOUR: ¿Tu regla infalible de estilo? DAPHNE: Algo negro. Como regla suena raro, pero creo que el negro siempre queda bien. GLAMOUR: ¿Algo que jamás te pondrías? DAPHNE: Un vestidito rosa y cursi. No es para nada mi estilo. GLAMOUR: ¿Qué libros te gustan? DAPHNE: Disfruto leyendo novelas de misterio en holandés. GLAMOUR: ¿Una película que te haya marcado? DAPHNE: Me llaman Radio, con Cuba Gooding Jr., Ed Harris y Debra Winger. GLAMOUR: ¿Un viaje pendiente? DAPHNE: Me encantaría conocer Australia.