Blanca Suárez
LA ACTRIZ DERROCHA NATURALIDAD Y TALENTO EN LO NUEVO DE ÁLEX DE LA IGLESIA.
sólo tiene 28 años y ya ha trabajado con Pedro Almodóvar y Álex de la Iglesia. Ha estado nominada a un Goya y quienes la cono cen di c en que esto es sólo el principio. Blanca Suárez habla despacio, dice que no se para a pensar cómo le va la vida y que prefiere disfrutar del día a día . Pero detrás de esa imagen dulce se esconde una actriz capaz de darlo todo por un personaje, tal y como hace en su nuevo trabajo, El bar, donde vuelve a repetir con Álex de la Iglesia interpretando a una pija que se ve atrapada junto a un grupo de desconocidos en un bar del centro de Madrid. Lo que viene después, es mejor que lo veas tú. GLAMOUR: ¿Qué se te pasó por la cabeza la primera vez que leíste el guión de El bar? BLANCA: Me quedé muy sorprendida porque me dio la impresión de que Álex se había puesto a escribir una historia sin saber si se podía hacer o no. Pero conociéndolo, sé que es de los pocos directores que cuenta con el privilegio de crear, escribir y, luego, vérselas y deseárselas para hacerlo. Me pareció increíble que escribiese de esa forma tan loca y sin filtros. GLAMOUR: En la película hay algunas escenas bastante duras y complicadas de rodar. ¿Cómo os prepara Álex para ese momento? BLANCA: Siempre se las apaña para que lo hagas y que encima quede bien. Si no le conociese quizá no me atrevería, pero con él no tengo el pudor que puedo tener con otros directores con los que no tengo tanta confianza. GLAMOUR: Detrás de ese argumento a priori surrealista se esconden algunos de los miedos que tiene la sociedad actual, desde el terrorismo, la violencia, el contagio o la dependencia tecnológica. ¿Qué valoración haces de ello? BLANCA: Muchas de las cosas que cuenta Álex están ahí, en la sociedad donde todos los días pasan cosas terribles, pero te levantas del sofá y sigues con tu vida. Tenemos miedo a cosas que ocurren en el mundo y que nos pueden salpicar en cualquier momento, pero todo está amparado bajo el paraguas de la falta de información, de la manipulación. Y no me refiero sólo a los medios de comunicación, sino a algo más extenso, una población con miedo es muy fácil de manipular. GLAMOUR: Tanto en Mi gran noche como en El bar sacas una vis cómica muy contagiosa. ¿En qué piensas para hacer reír? BLANCA: A no ser que seas un er udito de l a comedia , tip o Carmen Machi o Javier Cámara, que lo llevan dentro, el guión, los compañeros, el entorno... te anima a ello. Soy una persona muy reser vada y tímida , pero me gusta hacer bromas tontas, me gusta estar tensando la cuerda, si me achuchan un poco y me animan, lo doy todo (risas). Es verdad que en El bar nos hemos juntado un equipo de gente con ganas de hacer muchas cosas locas, lo hemos pasado muy bien. GLAMOUR: El objetivo de cualquier actor es no encasillarse. ¿Te pasa a ti también? BLANCA: Creo que eso le pasa a todos los actores pero no está en nuestra mano, hacemos
“Si me insisten un poco, soy muy bromista”
lo que nos dicen, por eso agradezco que Álex de la Iglesia no se quede en lo básico y apueste por lo diferente, como siempre. GLAMOUR: La película acaba de estar en el Festival de Berlín. ¿Te produce vértigo hacer promoción internacional? BLANCA: Me da el mismo respeto presentarlo aquí que fuera de España, la única presión es hacerlo en otro idioma, eso es complicado. GLAMOUR: ¿Crees que el público y la crítica internacional sabrán entender y empaparse del estilo de De la Iglesia? BLANCA: Creo que hay un punto que no se termina de entender, pero su energía, su ritmo, la crudeza con la que cuenta las cosas... eso les llama la atención. Fuera de España agradecen ver cosas auténticas, por eso les impresiona tanto Pedro Almodóvar, por lo diferente. GLAMOUR: El año pasado rodaste en Estados Unidos Mi panadería en Brooklyn. ¿Te gustaría repetir la experiencia? BLANCA: Sí, ¡me encantaría volver a repetir! Por practicar y salir de tu zona de confort. Si me surgiese un proyecto interesante me apuntaría, lo único malo de trabajar fuera es que te sientes sola y eso es complicado. GLAMOUR: Cuando uno es famoso ve cómo su vida privada está expuesta a los demás. ¿Es eso la parte más amarga de la fama? BLANCA: Lo peor es la falta del anonimato, pero si uno se lo curra, a no ser que seas Cristiano Ronaldo, que da igual donde vaya que siempre le van a conocer, en cualquier parte del mundo… Yo salgo de España y no tengo ningún problema y aquí puedo vivir tranquilamente, con algún paparazzi pero te acostumbras. GLAMOUR: Acudes a muchos eventos y ahora, en plena promoción de la película El bar, bastante más. ¿Disfrutas eligiendo tus estilismos o tienes a alguien que te asesora? BLANCA: Trabajo con la estilista Leticia Riestra y, cuando se avecina una temporada movida, nos organizamos para ver cuántos look necesitamos. Disfruto con la moda y a lo largo del año hacemos una selección de la ropa que nos gusta intentando que no nos pille el toro. GLAMOUR: ¿Alguna vez has dicho que no a un look que te hayan ofrecido ponerte? BLANCA: Sí, claro, hay una diferencia entre cómo te ves tú en persona y cómo te ves en la foto, eso lo sabemos todos los que trabajamos en este mundo. Hay equis cosas que me las puedo poner, pero me sientan mejor otras. El otro día buscando un vestido para un evento que tenía esa semana había uno increíble, pero tenía un pequeño detalle que no me gustaba… y me decanté por otra cosa. GLAMOUR: En El bar se te ve más delgada. ¿Sueles hacer dieta? BLANCA: Normalmente no, pero para El bar tuve que hacerla y adelgacé ocho kilos, ha sido la única vez en mi vida que he hecho dieta, pero fue para algo muy concreto. Lo que quería era estar durante la película sin la preocupación de si me sobra este kilo de aquí, porque luego te ves en una pantalla de 20 metros y dices: “¡Esto no es lo mismo que verlo en la tele (risas)!”. GLAMOUR: Te hemos visto recientemente en la nieve. ¿Cómo te cuidas para estar en forma? BLANCA: Lo intento pero es complicado mantener la rutina, sobre todo, cuando estás rodando con horarios diferentes... GLAMOUR: En enero tuvo l ugar l a marcha Women’s March. ¿Qué te parece que estrellas del cine participen y apoyen esta causa? BLANCA: Cada uno tiene que hacer lo que quiera. Muchas veces se pide a la gente co - nocida que se signifique, pero es un arma de doble filo porque luego te caen críticas injustas. En España pasa. Aquí defender a tope a tu país se puede ver un poco extraño… Pero me parece muy fuerte que en pleno siglo XXI tengamos que estar con manifestaciones de este tipo, defendiendo los derechos de las mujeres. Creo que deberíamos hacerlo más.
“¡No me paro a pensar en cómo me va la vida!”