El efecto Philo
CASI DOCE MESES DESPUÉS DE SU PARTIDA, LA PASARELA REVELA LA PROFUNDA HUELLA DE LA DISEÑADORA QUE CONSTRUYÓ EL ARMARIO DE LA MUJER MODERNA.
tras un año de especulaciones, el pasado diciembre la prestigiosa cabecera WWD confirmaba la que fuera la noticia más temida de la industria de la moda en meses: Phoebe Philo abandonaba Céline justo cuando se cumplía una década como directora creativa de la etiqueta que la encumbró a lo más alto. La diseñadora que marcó una era con su revolución tranquila configurada a base de jerséis de cachemir, abrigos masculinos, faldas midi y pantalones de pata ancha –piezas, todas ellas, grabadas a fuego en el ADN de la marca parisina–, dejaba huérfanos a toda una legión de phoebians que veía desvanecerse en unos instantes el sueño de una década de aspiración e inspiración. Porque ciertamente, no ha habido objeto o tendencia que la diseñadora subiera a la pasarela y que no acabase convirtiéndose en dictado global o en
Durante una década, Céline capitaneó la revolución del lujo silencioso, ese que se construye con piezas confortables y líneas sencillas
fuente de inspiración para otras marcas algunas temporadas más tarde.
En este sentido, son muchos los diseñadores que parecen interesados en continuar la estela que deja Philo tras su partida. Al frente de Loewe, J. W. Anderson diseña piezas que alcanzan el nivel de sofisticación práctica de la firma francesa. El diseñador –nacido en el norte de Irlanda, residente en Dalston y celebrado en París–, invitaba a la reflexión y a la tranquilidad en su propuesta para esta temporada. En la sede de la Unesco parisina, libros de autores como Cervantes, Flaubert o Joseph Conrad (en su lengua original), no hacían sino subrayar los intelectuales comentarios del diseñador británico. "La lectura sugiere que el clasicismo siempre está ahí para seguir hablando de moda. A veces con cambiar el color tu propuesta se vuelve relevante y actual", explicaba a los medios desde el backstage.
A pesar de no formar parte del calendario oficial, todo el mundo hablaba sobre Céline durante la pasada semana de la moda parisina. Desde el instante en que se confirmara la noticia de la partida de Philo, los insiders de la industria han especulado incesantemente sobre la redefinición del soft luxury que había dibujado la diseñadora durante todos estos años. Ella, la responsable de construir el armario completo de la mujer del siglo XXI, se despedía de su legión de seguidores haciendo hincapié en el tipo de mujer al que siempre había querido vestir: seria, refinada, fuerte, intelectual. "(...) Hay demasiadas imágenes de mujeres sexualizadas y otras muchas que se visten para otras perdiendo su propio poder en el proceso", había llegado a comentar en alguna de las pocas entrevistas que concedió durante esta década al frente de Céline. ¿Habrá calado tan profundamente en el ADN de la casa que a Hedi Slimane no le quede otro remedio que reflejarlo de alguna manera? Curiosamente, es otra mujer la que defiende los mismos valores que Phoebe sobre la pasarela. "Libertad, confianza, poder, fuerza, realidad e identidad", en estos términos resumía Victoria Beckham su colección para este invierno. La diseñadora continúa en su empeño por crear diseños imprescindibles para la mujer contemporánea gracias, en parte, a unos looks fuertemente vinculados a sus orígenes británicos. La sastrería ligera, las impecables chaquetas de franela y los zapatos planos puntiagudos perfilan una mujer en
Hasta el último momento, Phoebe Philo se resistió a sucumbir a las redes sociales a través de Instagram
las antípodas de sus comienzos. "Creo que llevo muchísimos años hablando del empoderamiento de la mujer, pero nunca ha sido tan necesario como ahora, con todo lo que está pasando en el mundo. Tanto para mí como para mis clientas creo que lo más importante es sentirse segura y cómoda", declaró la diseñadora. En la misma senda de contención intelectual, la propuesta de la diseñadora coreana con sede en Londres, Rejina Pyo, aspira a convertirse en uno de los talentos más brillantes de los últimos años. La perfecta combinación entre creatividad pragmática y la dosis justa de punch comercial da como resultado una colección que anuncia algunas de las piezas más deseadas del invierno, no en vano, rostros tan ubicuos como Kate Foley, Leandra Medine o Pandora Sykes se han hecho con algunas. Al igual que Lemaire, Y/ Project e incluso Givenchy, la pasarela refleja la profunda influencia de Philo sobre las propuestas de un invierno que será recordado como el primero que pasamos frío... sin Phoebe.