Solsticio de invierno
Entre lo comercial y lo conceptual, la diseñadora danesa Cecilie Bahnsen actualiza el romanticismo a través de sus vestidos voluminosos y escultóricos. Hablamos con ella sobre feminidad en el siglo XXI.
ecilie Bahnsen está exultante tras la presentación en Copenhague de su colección para la próxima primavera. Y motivos para ello no le faltan. La diseñadora danesa ha sido capaz, en apenas tres años, de erigirse como la etiqueta escandinava con mayor proyección internacional y de construir un discurso propio y completamente reconocible asentado en una reinterpretación particular de la feminidad. Un poco del celebrado filme australiano, Picnic at Hanging Rock, otro poco de austeridad Amish, aderezado con cierta dosis del misterio de comunidades paganas y del folclore de druidas y celtas, dan como resultado un universo estético que ha logrado posicionarse a la altura de grandes nombres como Simone Rocha o Erdem. En las distancias cortas, Cecilie es tranquila y segura de sí misma, y se muestra muy ilusionada ante la relevancia que la industria de moda danesa está adquiriendo en el circuito internacional. Y no, no deberíamos olvidar nunca que ella fue una de las pioneras.
GLAMOUR: ¿Cómo recuerdas tu infancia en Copenhague? ¿Cuál es tu primer recuerdo de moda?
CECILIE: Mi primer recuerdo de moda es bordando y tejiendo con mi abuela en nuestra casa de verano. Ella me inspiró para trabajar con las manos y artesanalmente a través de sus intrincadas flores bordadas, las más bonitas que he visto nunca.
GLAMOUR: Cuando comenzaste a trabajar en el mundo de la moda, ¿sentiste que estabas, al fin, en casa?
CECILIE: Siempre supe que quería estudiar moda. Cuando tenía doce años hice mis primeras prácticas en la Escuela de Diseño de Dinamarca y me enamoré de la atmósfera que allí se respiraba y del hecho que era posible dibujar y crear una fantasía para después transformarla en algo real.
GLAMOUR: Parece que la moda de Copenhague es cada vez más importante en el circuito global de la industria. ¿Es la chica danesa el próximo hype?
CECILIE: Cuando me mudé a Copenhague, en 2015,
para crear mi propia línea, tenía mucho miedo. ¿Quién iba a fijarse en una pequeña marca que había nacido en el pueblo danés más pequeño y perdido que puedas imaginar? Sin embargo, el hecho de que la industria de la moda adquiera cada vez más importancia en Dinamarca –y concretamente en Copenhague– me ha ayudado mucho. Creo que la clave es la gran diversidad de marcas que existen en la ciudad y que, a pesar de ser diferentes, comparten una visión muy relajada de la industria que automáticamente la transforman en algo deseable para el resto del mundo.
GLAMOUR: ¿Cuáles han sido tus referencias a la hora de crear tu última colección, la de la próxima primavera/ verano 2020?
CECILIE: El escenario que elegí para presentar esta colección fue el Puerto de Copenhague, completamente al aire libre, y el desfile se inauguró al ritmo de Chum, del rapero americano Earl Sweatshirt. El mensaje que transmite su música fue uno de los puntos de partida: escapar de todo y vivir tu vida como quieras, de una forma mucho más creativa. Además, mi amigo August Rosenbaum compuso una pieza de piano para acompañar la transición de las primeras salidas, mucho más masculinas, hacia las del final, románticas y femeninas como suele ser nuestro universo. En realidad, nunca tenemos en cuenta las tendencias, lo que pretendo con cada colección es captar y transmitir fielmente el ethos de la marca. Además, esta es la primera colección en la que introducimos sastre.
GLAMOUR: ¿Cuál es la historia que quieres contar a través de las mujeres que llevan tus diseños?
CECILIE: Para mí, hay mucha fuerza y mucho poder en el romance y en la feminidad. Hago ropa para que las mujeres se sientan cómodas, fuertes e independientes. Cada mujer Cecilie Bahnsen posee su propia individualidad, su postura, su manera particular de hacer las cosas. Para ella, su ropa es un tesoro, pero por encima de todo, son prendas para cubrirse, para abrigarse. Ropa para días eternos, para días más cortos y para todos los días; para compartir, para prestar y para que perdure en el tiempo. Significa mucho para mí ver cómo las mujeres que llevan mis creaciones las adaptan a su propio estilo.
GLAMOUR: ¿De dónde suele venir tu inspiración? CECILIE: Me gusta fijarme en el atuendo que llevaban los niños en la época victoriana, su ropa estaba tan repleta de pequeños detalles que una sola imagen puede inspirarme para una colección completa. También suelo ver películas y leer libros que se centran en grupos de mujeres y la amistad entre ellas, como por ejemplo las imágenes del fotógrafo Osamu Yokonami o las películas de Sofia Coppola. Adoro los detalles de las tradicionales casas de costura, especialmente estoy enamorada de los volúmenes y el uso del color de Cristóbal Balenciaga.
GLAMOUR: Sobre ti misma, ¿de qué manera ha influido tu background cultural en tu trabajo?
CECILIE: Siempre me ha gustado ponerme vestidos puffy y utilizar accesorios girly, pero también disfrutaba mucho jugando con los chicos, así que los combinaba con jerséis gruesos, zapatillas y grandes chubasqueros. De alguna manera, es el camino que yo sigo a la hora de marcar el estilismo de la colección. Lo mejor de nuestros diseños es que te los puedes poner para ir a una fiesta, pero también un lunes cualquiera.
GLAMOUR: ¿En qué momento decides crear tu propia marca?
CECILIE: En 2010, justo después de graduarme en el Royal College of Art en Londres. Sabía que era necesaria la creatividad y las buenas ideas para sacar adelante una marca, así que investigué mucho sobre el funcionamiento de la industria y trabajé en París y en Londres antes de tomar la decisión.
GLAMOUR: ¿Qué crees que le falta a la industria de la moda?
CECILIE: Tiempo y reflexión. Todo se está moviendo demasiado rápido, siempre a la búsqueda de lo último y lo más nuevo, de la tendencia que está por llegar… Creo que la atemporalidad y las colecciones que duran muchos años resultan mucho más interesantes.
GLAMOUR: ¿Y qué es lo más emocionante de ser diseñadora de moda en una ciudad como Copenhague?
CECILIE: Somos conocidos por nuestra arquitectura y nuestro diseño, así que es muy interesante ver que las expectativas en cuanto a moda en Dinamarca todavía no están definidas. Queda mucho por hacer.
GLAMOUR: ¿Qué es lo próximo para Cecilie Bahnsen? CECILIE: El objetivo de Cecilie Bahnsen es diseñar ropa para mujeres que son capaces de reconocerse en nuestros diseños y que se sienten parte de una especie de hermanamiento entre ellas. Quiero seguir luchando por cumplir mis sueños y poder continuar creando piezas imperecederas, que se guarden para siempre.