CANCIONES FAVORITAS

Todas las de Astronauta son especiales porque las he visto nacer, pero si tuviera que quedarme solo con una sería con El Fango porque me encanta sacar la rabia con ella. De discos anteriores, depende del día: El Deshielo, La Gracia, Tú me llevas, Photofinish… Admiro a mi mejor amiga. Por si este titular no fuera suficiente, os confesaré que también estoy muy orgullosa de ella. En este tiempo que ha pasado desde que la conozco —relativamente poco— la he visto hacer cosas increíbles: ha sido madre, ha creado su disco Astronauta y todo el universo que lo acompaña, ha dado conciertos en festivales, salas y teatros, ha escrito una novela y un poemario, ha grabado varios videoclips, infinidad de entrevistas y algún programa de televisión. Solo con una de todas estas cosas que ella ha hecho, yo ya me habría tropezado varias veces, pero —en su caso— parece que ni se despeina (obviaré esos moños deconstruidos que se hace). Sé que la realidad es otra. La he visto trabajar tanto y descansar tan poco que a veces me pregunto si no preferiría parar. Luego la veo subida a un escenario, componiendo en alguna habitación o leyéndole el cuento por las noches a su hijo y sé que no sería tan feliz en ninguna otra vida. Conocí a Zahara en clase de yoga hace tres años cuando llegué a la ciudad. No tengo muy claro cómo pasó de ser mi compañera de asanas en los tejados de Madrid —hacíamos las clases en la terraza de un hotel del centro— a ser alguien indispensable en mi día a día. Creo que conectamos en una de esas clases de yin yoga en la que las dos acabamos riendo y llorando sin entender muy bien qué nos pasaba. Muchas veces me preguntan que por qué nos llevamos tan bien. No tengo ni idea, pero intuyo que es porque nos cuidamos mucho y nos permitimos ser nosotras mismas siempre. Además de eso, nos hacemos gracia; no se puede subestimar el poder de un buen ataque de risa. Personalmente, Zahara me hace sentir mucho más capaz y enorme de lo que yo creo ser la mayor parte de las veces. A alguien que te hace sentir tan empoderada y comprendida es necesario tenerla cerca. En mi caso, yo diría que le doy calma. Nada más verla ya sé cómo está; a veces incluso cuando está en la otra punta del mapa. No sé cuál de las dos tiene el papel de hermana mayor o hermana pequeña, pero me encanta el equilibrio que hemos conseguido. Es una suerte haber podido vivir con ella parte de esta gira, notar cómo la gente la quiere y sentir de alguna manera la magia que se crea encima de un escenario, pero lo más increíble ha sido formar parte de esa familia que hace que todo eso sea posible antes, durante y después de un concierto: ver cómo se cuidan y se disfrutan es un regalo. Amiga, eres mi unicornio favorito