RACHEL MCADAMS
• MUCHO SE HABLA ÚLTIMAMENTE de los milleninals. Sociólogos –licenciados y esporádicos– se enzarzan en eternas discusiones sobre quiénes son, qué les interesa, cómo llegar a ellos. Y nadie hasta ahora se ha dado cuenta de que existe un mínimo común múltiplo, un bello hilo conductor, que define a toda esta generación: si alguna vez has amado a Rachel Mcadams (o la has odiado, o la has temido, o te ha roto el corazón), puedes considerarte parte de este colectivo social que define las reglas de la cultura occidental contemporánea.
La actriz, que se ganó un hueco en el imaginario colectivo de la generación nacida después de 1980 con títulos inolvidables como Chicas malas o El diario de Noah, es hoy una de las intérpretes más polifacéticas de nuestro tiempo. Así lo demuestran los estrenos que nos tiene reservados para este verano: para empezar, la segunda temporada de la serie de culto True Detective (que emite Canal+ desde el 21 de junio); el 24 de julio, Todo saldrá bien, del celebrado realizador alemán Wim Wenders; y en septiembre, Aloha, la nueva comedia romántica de Cameron Crowe, en la que comparte protagonismo con Bradley Cooper y Emma Stone.
Y habrá más (Southpaw junto a Jake Gyllenhaal y Spotlight, con Mark Ruffalo y Michael Keaton, ambas también para este año), pero para no abrumarte quédate con esta idea: a sus 36 años, la actriz canadiense estrenará en menos de tres meses un drama policiaco para televisión, una película de autor en 3D y una historia de amor con tintes de taquillazo. No hay una diva en Hollywood con la versatilidad de Mcadams. ¿Pero cómo se ha convertido la chica que estaba llamada a ser la nueva Julia Roberts en un camaleón interpretativo adorado por crítica y público?
"Quieres que los espectadores te vean interpretando todo tipo de personajes. Si piensan que solo vales para hacer un papel, es muy difícil que te salgan proyectos diferentes", explicaba en una entrevista reciente. Esta fue la conclusión a la que llegó en 2005, cuando era una it girl que copaba las portadas de las revistas más influyentes del mundo. Acababa de estrenar De boda en boda y no estaba contenta con el cariz que estaban tomando las cosas. "Fue como una especie de replanteamiento y continuación, pensar cómo quería que fuese mi éxito", recuerda.
Así que dio un golpe de timón a su trayectoria, adoptó un perfil bajo, y empezó a construir una filmografía en la que cabían desde géneros en los que ya se desenvolvía con soltura (comedia y drama romántico), hasta incursiones en nuevos territorios, como la acción (Sherlock Holmes), los thrillers (El hombre más buscado) o el cine de corte artístico (Midnight in Paris).
Y su estrategia dio resultado: hoy Rachel Mcadams no solo es una de las actrices más cotizadas de la industria, sino que además se ha ganado el respeto de los nombres más influyentes del cine y la televisión. Como el creador de True Detective, Nic Pizzolatto, que pensó en ella para encarnar a la comprometida y atormentada detective Ani Bezzerides, encargada de investigar el brutal asesinato de un político corrupto en esta nueva temporada de la serie de HBO. "Buscaba una actriz que no fuese extrema o que, al menos, no se la percibiese como tal. Rachel proyecta luz y calor, y si cubrimos esa esencia con los mecanismos de defensa y agresión que su personaje habría desarrollado para sobrevivir, el resultado es una interpretación llena de matices y distintos niveles de lectura", explica.
Y así es cómo, después de enamorarte, irritarte, hacerte reír (y llorar), desconcertarte y sorprenderte, Rachel Mcadams no solo se ganó tu corazón, sino también tu respeto.
POR IAGO DAVILA
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O cómo pasar de ser la novia de la generación millennial a protagonista de la nueva entrega de True Detective. Esta es la transformación de la peor de
las chicas malas en una de las mejores actrices de nuestro tiempo.