El exorcista inglés

Tras triunfar como rudo inspector de policía en Life on Mars, Philip Glenister protagoniza Outcast, la nueva serie de Robert Kirkman.

En las entrevistas, Philip Glenister (Londres, 1963) siempre coloca por delante a su familia –la actriz Beth Goddard y sus dos hijas preadolescentes– como una suerte de barrera frente al periodista. Harto quizá de que le hagan la pregunta de si en la vida real actúa igual que en la pantalla –es decir, de si hay algo del malhumorado inspector Gene Hunt (su rol en las aplaudidas series británicas Life on Mars y Ashes to Ashes) en su día a día–, Glenister prefiere presentarse como un tipo risueño que disfruta del éxito tardío pasados ya los 50 y al que le cuesta mucho salir de casa. Tanto que no resultó nada fácil convencerlo para que diera el salto a EE UU y aceptase trabajar en Outcast, la nueva serie de Robert Kirkman, el creador de The Walking Dead.

De hecho, hace unos años le tentaron para hacer el remake americano de Life on Mars, pero declinó la oferta. "Estaba demasiado vinculado al personaje tal y como era en Inglaterra como para ponerle otro acento y crearle otra vida", nos cuenta justo antes de aclarar que si esta vez sí se ha atrevido ha sido porque su mujer casi lo ha obligado a hacerlo: "Me dijo que a lo mejor no me surgía otra oportunidad y que tenía que aprovecharla".

Glenister, gran futbolero, siempre vio a su inspector Hunt como un remedo de Brian Clough, el mítico entrenador de los años 70. No tiene muy claro, sin embargo, con quién comparar al reverendo Anderson, su nuevo personaje en Outcast (estreno en Fox España el lunes 6 de junio a las 22:20 horas). En este caso, el escenario no es Atlanta (como en The Walking Dead), sino la inventada ciudad de Roma, en West Virginia. Y no hay zombis sino poseídos por el demonio, carne de exorcismo que el reverendo combate solo hasta que encuentra la ayuda de Kyle Barnes (Patrick Fugit), un hombre rodeado de maldiciones. La serie, que no abandona en ningún momento el tono explícito tan habitual en Kirkman, gusta de misterio, de cliffhangers que combinan terror con psicología y de personajes perdidos que giran en torno a la sobriedad de Glenister, convertido de nuevo en un magnífico referente.

Las chicas del calendario Hidden Mad Dogs.