Mordisco irlandés
El romance de la poderosa Apple con el país celta ha acabado en multa millonaria. Te explicamos por qué.
Lacomisióneuropeahaordenadopagar a Apple 13.000 millones de euros en impuestosalgobiernodeirlanda,pero Irlandanoquierecobrarlos.¿cómo?¿sehan vuelto locos los irlandeses? No sabemos si el pueblo opinará lo mismo, pero el Gobierno tiene claro que no quiere ese dinero. Parece el mundo al revés, pero tiene su explicación (lo que no significa que tenga justificación). Por un lado, tenemos la agresiva política de impuestos de Irlanda para atraer multinacionales, que sitúa este impuesto en el 12,5% sobre beneficios (en España es de un 30%). Sin embargo, el asunto Apple es mucho más complejo y va más allá, porque la compañía fundada por Steve Jobs, mediante una arquitectura muy fina de estructuras societarias, y con la complicidad del Gobierno de Dublín, ha llegado, en la práctica, a casi no pagar nada de impuestos desde 2003. Y Bruselas ha dicho basta.
¿Cómo lo hacían? Pongamos como ejemplo España. La Apple Store y demás puntos de venta autorizados de nuestro país compranlosteléfonos,lastabletasylosordenadores que nos venden a nosotros a una matriz radicada en Irlanda. Sin embargo, los compran a precios artificialmente altísimos, lo que hace que su margen de beneficios sea poco menos que simbólico. Y como los impuestos se pagan por beneficios (un 30%), pues un 30% de casi cero es casi cero. Apple Irlanda es la que se forra a mansalva, porque registra todas las ventas de toda Europa. El siguiente paso fue librarse de ese 12,5% por parte de la firma irlandesa. Y para eso, según la Comisión Europea, la empresa norteamericana se benefició de dosresolucionesfiscalesemitidasporirlanda sobre la distribución interna de beneficios. Dichas resoluciones permitían a Apple Sales International en Irlanda mandar a una "administración central" la mayor parte de los beneficios. Dicho ente "no contaba ni con empleados ni con locales propios", según Bruselas. Solo se reunía de vez en cuando la Junta Directiva, que efectivamente estaba configurada por gente de Apple. Para hacernos una idea de cuánto dinero se quedó esa "administración central" fantasma y cuánto se quedó Apple Irlanda, la denuncia explica que en 2011 la empresa ganó16.000millonesdeeuros,perosetransfirieronaesaentidadfantasma15.950millones. Eso implica que Apple Sales en Irlanda "solo" ganó 50 millones de euros, por lo que pagó en impuestos menos de diez millones. O sea, que de ese total de 16.000 millones, lamultinacionalcaliforniana por sus operaciones en la UE solo pagó el 0,05% de su beneficio total anual. Cero patatero. Y solo en 2011. Pero por si esto fuera poco, este sistema siguió "progresando" hasta el punto de que en 2014 esa factura solo llegó al 0,005%. ¿Cómo te quedas? Tal y como explica la Comisión Europea, formalmente las dos resoluciones fiscales específicas que se aprobaron en 1991 y 2007 por parte del gobierno irlandés son legales. Sin embargo, la consecuencia de dicha normativa es una distribución de beneficios "carente de justificacióneconómicaobjetiva",asíqueconcluyequees"artificial",porloquelaconsecuencia es una ayuda de estado ilegal para Apple dentro del marco europeo.
La denuncia no pone en tela de juicio ni el sistema general de impuestos de Irlanda (un 12,5% para sociedades) ni el curioso sistema que explicábamos antes sobre cómo Apple se organiza para "repatriar" beneficios de España, Francia o Alemania. La cosa es que al final los funcionarios europeos han ido sumando año a año el dinero que se ha dejado de pagar a las arcas irlandesas y el saldo final es de 13.000 millones, que ni unos quieren pagar, lógicamente, ni los otros quieren cobrar, paradójicamente. En cualquier caso, Bruselas invita al resto de países a reclamar "su parte" de todo este entramado, por si alguien quiere pillar parte del pastel.