DESTILADOS Roe & Co, un whiskey respetuoso con la mejor tradición de los blended.
Nace en Dublín Roe & Co, un whiskey blended premium complejo y respetuoso con la tradición productora del país.
El whiskey irlandés –añadimos la e porque hablamos de la versión Irish, traducida del gaélico como "agua de vida"– es algo tan serio para la cultura del país como el simbolismo del trébol, el rugby o la letra de Molly Malone. Antes que en Escocia, la primera destilería se levantó en Éire. La rivalidad entre ambas paternidades es sempiterna, así que mejor no entrometerse. Cada líquido dorado hunde sus raíces en la tradición y la historia, por lo que asistir al nacimiento de una nueva criatura de esta familia con carácter supone un privilegio.
Comercializado por Diageo, Roe & Co ha visto la luz en The Liberties, el corazón del Dublín que acogió la edad de oro de la destilación local, un distrito dispuesto a rememorar un orgullo pasado que la Ley Seca cercenó reduciendo drásticamente el número de sus destilerías. Hoy el whiskey vive una segunda juventud y es en este clima en el que Roe & Co se posicionará con su obligada triple destilación, un estándar que la sitúa entre el punto dulzón del bourbon y el muro ahumado del scotch, sin llegar a ser un trago de pipa y chimenea.
La primera remesa de Roe & Co ya está disponible, aunque será en 2019 cuando su producción se normalice. Esta partida ha sido posible gracias a las más de 100 mezclas procedentes de una concienzuda selección de whiskeys irlandeses. Con ellas, Caroline Martin, master blender de la marca, logró dar con la fórmula mágica de un "agua de vida" suave y compleja. En dos años, como decimos, el whiskey correrá libre por las entrañas de The Power Station, la nueva destilería ubicada en la vieja planta que abastecía de energía al complejo Guinness. A un paso de esta pirámide de ladrillo y chimeneas, en la misma calle Thomas, se vislumbran los restos de la que fue la destilería más grande de Irlanda, aquella en la que George Roe se convirtió en el mayor exportador de su época. En su honor, este Roe & Co lleva su apellido. La botella, por cierto, evoca el antiguo molino de viento de la estación energética, conocido hoy como la Torre de St. Patrick's.