DE FIRMA ¿Traje y corbata como dogma? Dockers quiere cuestionar lo incuestionable.
#Gamechangers, la nueva campaña de Dockers, nos invita a cuestionar lo incuestionable a través de la figura del empresario catalán Pau Cuervo.
Según el informe Doing Business que publicó el Banco Mundial el año pasado, España ocupa el 82º puesto en la lista de los mejores países del mundo para emprender. Dicho de otra manera, abrir un negocio en nuestro país es poco menos que un insufrible martirio por culpa de la caótica burocracia y la dificultad para obtener ciertos permisos. De modo que todo aquel compatriota que, a pesar de las advertencias, no duda en atreverse a materializar sus sueños merece, cuando menos, un fuerte abrazo de parte de todos nosotros. Por ejemplo, el empresario Pau Cuervo, fundador de la agenciaelkanodatayembajadordelanueva campaña de Dockers: #Gamechangers.
Este barcelonés de 32 años sobrevivió a la odisea de lograr ser su propio jefe y desde hace seis años dirige una empresa especializada en "transformar información compleja en contenido visual de calidad", es decir, en hacer bonito lo feo o convertir conceptos enrevesados en ideas sencillas. "Emprender significa creer en maneras alternativas de llevar a cabo las ambiciones profesionales y vitales, y ejecutarlas con determinación y esfuerzo"… y no morir en el intento, añadimos. Por eso tal vez Dockers ha querido identificar su propia historia con la de este soñador tan realista.
La nueva campaña de la firma estadounidense, la primera concebida en exclusiva para el mercado español, reivindica el decisivo momento en que el empresario Robert Siegel decidió revolucionar los formales estilismos que imperaban en el mundo de los negocios a través de una alternativa casualwear: los célebres pantalones khaki , un invento capaz de encajar tanto en la oficina como en una cena con amigos. Ese espíritu que cuestionó lo que todo el mundo daba por hecho es lo mismo que hoy, tres décadas después, defiende Pau Cuervo. Por supuesto, sin traje ni corbata.