Bailando con el hielo
Si le contaras a un finlandés los líos que se arman en las carreteras españolas cada vez que caen cuatro copos de nieve, probablemente se partiría de risa. En Laponia no hay un metro cuadrado que no esté cubierto de blanco durante la estación más dura y te podemos asegurar que los lugareños no se quedan tirados en ningún camino, gracias –en gran parte– a la obligación de llevar neumáticos de invierno desde el 1 de diciembre al 28 de febrero. Desde el punto de vista recreacional, existen múltiples empresas que ofrecen cursos de conducción sobre hielo o nieve, ya sea en tierra firme o en lagos solidificados. Son una excelente ocasión para aprender la técnica del drifting y divertirse a rabiar cruzando el coche en condiciones de seguridad. Sobre todo, si dicho coche es un Subaru WRX STI, la bestia deportiva de la marca japonesa, con 300 CV y tracción a las cuatro ruedas. La técnica es relativamente sencilla.trazar lamiendo el arcén de nieve con el morro y apretar con decisión el gas para que la trasera redondee la curva. Si lo haces bien, la experiencia es lo más parecido a bailar que puedes practicar con un automóvil.