CREADO PARA PERDURAR
De color miel y cuerpo tan agradable como suave, envejece durante 12 años en barricas de roble para deleitarnos con un sabor dulce de notas afrutadas.
Imaginemos que viajamos 200 años al pasado. Nos encontramos en la Escocia de 1811. En la región de Speyside, la cuna del whisky escocés, Helen Cumming comenzó a elaborar su propio whisky. Cuando se aproximaban la autoridades, corría hacia su destilería, emplazada en la cima de una colina, que siempre era la primera en ser revisada. Allí ondeaba una bandera para advertir a sus vecinos, también productores de whisky. Este arriesgado acto se convirtió en una tradición. Helen selló un ritual con sus vecinos alrededor del whisky, que trascendió su significado: estaba creando una comunidad que giraba alrededor del líquido ambarino. Así, Helen sería reconocida como 'la primera mujer del whisky', convirtiéndose en una figura de referencia, respetada y admirada por los suyos. Gracias a ella nació el icónico whisky de malta escocés Cardhu. Hoy día, la imagen de Helen Cumming haciendo ese mítico gesto se ha convertido en todo un símbolo, dotando de personalidad a las botellas de la marca. La comunidad fue haciéndose más fuertete y cohesionada con el transcurso del tiempo, hasta cumplir con más de dos siglos de destilación lenta y mimada. Cientos de años repletos de alianzas, compromisos, relaciones únicas, momentos compartidos… Todasodas las experiencias que construyen una vida plena, acompañadas de una copa on the rocks del whisky de malta Cardhu 12 años: equilibrada, cálida, de sabor dulce, intensa, dorada y suave. Tan placentera como la mejor compañía. Cardhu es el regalo perfectofecto para los amantes del whisky que esperan con emoción las celebraciones que se avecinan, una época de brindis y cenas eternasnas que se convertirán en momentos inolvidables. Tambiénambién es perfecto para quien sabe disfrutar wdel día a día; encarnana estos vínculos duraderos que hacen que la vida valga la pena. Hoy, se sigue elaborando para ser compartido y disfrutado generación tras generación, con aquellos que de verdad importan y que nos hacen ser como somos: auténticos.