El trigo duro está a precios de hace 25 años y cada vez se siembra menos
Asaja-Sevilla aconseja a los productores que almacenen la cosecha a la espera de una mejor evolución de las cotizaciones Empieza a observarse un repunte en todos los cereales
Duros momentos para el trigo duro. La jornada que Asaja Sevilla celebró la pasada semana en Carmona, una vez finalizada la recolección del trigo en la provincia, viene a confirmar la tendencia que ya se puso de manifiesto en la última edición de la Andalusian Commodity Exchange: que la superficie de trigo duro va a seguir reduciéndose a causa de los bajos precios de este cereal.
El responsable técnico de la sectorial de cultivos herbáceos de Asaja-Sevilla, José Vázquez, informó de que “se están pagando precios que son entre un 15% y un 20% inferiores a los de la campaña pasada” y ello pese a que, en su opinión, “no hay razones objetivas que justifiquen estos bajos precios en origen, que se sitúan en niveles de hace 25 años, pues la media de proteínas, aunque ligeramente más baja que otros años en el trigo duro, en esta campaña está prácticamente en un 12% de media”.
Agregó que “se están vertiendo informaciones sesgadas de que esa cifra es bastante inferior”, por lo que considera fundamental un análisis de los trigos.
Durante las jornadas de AsajaSevilla, Vázquez hizo un repaso a las superficies, las producciones y la situación de mercado en el sector de los cereales y las oleaginosas. El técnico consideró que la calidad no está siendo compensada con precios y en las circunstancias actuales va a haber un diferencial importante en precio a favor de las calidades más altas. No obstante, Vázquez aseguró que ya se aprecian repuntes de precios en todos los cereales, aunque el incremento de éstos, de momento, es moderado pero firme.
De hecho, informó de que “ya la Lonja de Cereales de Sevilla incrementa en 5 euros por tonelada el precio de los trigos”. Por otra parte, puso de relieve que los precios del trigo blando están superando por primera vez a los del trigo duro.
Ante esta circunstancia AsajaSevilla considera una buena práctica que los agricultores “almacenen su cosecha en instalaciones propias y en las cooperativas, para ir comercializándola de manera ordenada a lo largo de toda la campaña, conforme los precios se vayan recuperando”.
Esta recomendación se basa en la observación del mercado internacional, ya que la cotización del grano es mayor. En Francia, por ejemplo, contó Vázquez, el trigo duro cotiza en sus lonjas entre 215 y 218 euros la tonelada. “Ésa será la referencia para las exportaciones que se avecinan y que irán aumentando en los próximos meses para abastecer los mercados tradicionales”, aseguró el técnico de Asaja-Sevilla.
En cuanto a las estimaciones de cosecha para esta campaña, Asaja-Sevilla considera que hay una producción media-alta, con un rendimiento medio bastante bueno, gracias a la primavera lluviosa y a las suaves temperaturas registradas.
No obstante, José Vázquez indicó que la rentabilidad del cultivo es relativa, ya que para cubrir los costes de producción, que se sitúan en una media de 650 euros de por hectárea de trigo duro, se necesitaría un rendimiento mínimo de 3.500 kilos por hectárea. Pero el rendimiento es distinto según la zona y oscila entre los 3.300 y los 5.000 kilos por hectárea. Así, por ejemplo, se han obtenido entre 3.500 o 4.500 kilos por hectárea en zonas de Campiña y en torno 3.000 en algunas zonas de la Sierra Sur.
En Sevilla la producción de trigo duro se estima en 373.660 toneladas, por debajo de las 382.000 que se recogieron el año pasado y unas 822.000 en Andalucía frente a las 842.700 en la campaña anterior. En el conjunto nacional el dato ha mejorado, pues se espera alcanzar
“No hay razones objetivas que justifiquen los bajos precios en origen” Se espera un diferencial de precio importante en favor de las calidades más altas
1.250.000 toneladas mientras que en 2017 fueron 1.159.000.
En trigo blando, Asaja-Sevilla estima una producción de 174.000 toneladas en la provincia de Sevilla, por encima de las 157.400 toneladas de la campaña anterior; 340.000 en Andalucía frente a las 286.100 cosechadas en 2017 y 5.500.000 toneladas a nivel nacional, muy por encima de las 3.828.000 toneladas de la pasada campaña.
Como comentamos al inicio, la evolución del cultivo del trigo duro es negativa en cuanto a la superficie. Vázquez explicó en las Jornadas de Asaja-Sevilla que los altos costes del cultivo y los bajos precios del mercado, han hecho caer la superficie de trigo duro en un 15% en Sevilla, pasando de unas 116.000 hectáreas cultivadas en 2017 a 99.000 ha en 2018 y “lamentablemente, prevemos que, con estos precios, las siembras continuarán descendiendo”.