INTOLERANCIA A LA LACTOSA
SEGÚN datos de la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD) y de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), entre un 30 y un 50% de los españoles tiene algún grado de intolerancia a la lactosa (IL). La lactosa es un disacárido hidrosoluble que se forma de la unión de galactosa y glucosa, principalmente presente en los productos lácteos aunque es también un aditivo alimentario de uso común utilizado por la industria de los alimentos debido a su bajo precio, su textura, sabor y cualidades adhesivas.
La IL ocurre por un déficit de la enzima beta-galactosidasa (lactasa intestinal), que se conoce como hipolactasia, ya que para ser digerida y posteriormente absorbida es necesario que la lactosa sea hidrolizada en sus monosacáridos constituyentes. Esta enzima está presente de forma habitual en las vellosidades del duodeno distal y del yeyuno proximal. Pero no siempre este déficit conlleva la aparición de síntomas y así el término “malabsorción de lactosa” significa que la lactosa no es absorbida, mientras que “intolerancia a la lactosa” se refiere a la aparición de síntomas clínicos originados por su malabsorción. La Sociedad Española de Patología Di- gestiva (SEPD) y Ferrer presentaron durante el LXXVII Congreso (dentro de la Semana de las Enfermedades Digestivas) el primer Protocolo de Diagnóstico de la hipolactasia/intolerancia a la lactosa. El objetivo es evaluar, mediante una prueba piloto a realizar en diferentes hospitales peninsulares, la viabilidad del test de gaxilosa en orina.
Tal y como se indica en este protocolo, el test de la gaxilosa se basa en determinar la eliminación de xilosa en orina (o sangre) después de la administración oral de gaxilosa (un disacárido sintético) que es desdoblado en xilosa y galactosa por efecto de la lactasa. Por ello, la cantidad total de xilosa en la orina se relaciona con la actividad enzimática de la lactasa intestinal, de forma que un valor anormalmente bajo de xilosuria traduce una situación de hipolactasia. De hecho, es la única prueba que en los estudios realizados ha sido comparada con el gold-standar de la determinación de lactasa en biopsia duodenal, demostrando una elevada eficacia. Es por ello que puede ser considerada una alternativa clínica, real y aplicable, al gold-standard.
Hay que recordar que se considera gold-standar a la cuantificación de la lactasa en biopsias duo- denales, la única prueba directa disponible para el diagnóstico de esta enfermedad.
El test de gaxilosa en orina está autorizado en nuestro país para adultos y adolescentes entre 12 y 17 años. En cuanto la evolución de la prueba se espera que en 2018 estará disponible el Point-of-care testing en orina y el análisis de sangre con Gaxilosa.
Aunque cada vez se está tomando más conciencia del problema que supone la intolerancia a la lactosa, el diagnóstico es una tarea pendiente en el Sistema Nacional de Salud porque, según indica el Dr. Fernando Carballo, presidente de la SEPD, “no hay una clara correlación entre los síntomas y la existencia de hipolactasia demostrable mediante un test de laboratorio”. Es lo que hay. Seguro.
El test de gaxilosa en orina puede ser considerado una alternativa clínica