Sabadell sacrifica beneficio y sanea balance ante su nueva etapa en solitario
La crisis del Covid-19 pasa factura al Banco Sabadell, que reportó en 2020 un beneficio de dos millones de euros, un 99,7% menos que los 768 que logró en 2019, tras provisionar 2.275 millones por la pandemia, ajustar plantilla y vender las últimas carteras problemáticas procedentes de la CAM.
Sin las pérdidas de TSB, su filial británica, el beneficio del banco hubiera sido de 222 millones de euros, un 71% menos, según los datos presentados ayer por la entidad, que espera recuperar posiciones en 2021 gracias a un menor volumen de provisiones por el Covid y a una aportación positiva de su sucursal en Reino Unido.
El Sabadell optó por sacrificar beneficios a base de sanear su balance ante la nueva etapa que inicia con la llegada como consejero delegado de César González-Bueno, quien será el responsable de diseñar el nuevo plan estratégico a tres años de la entidad, decidida a seguir en solitario tras la ruptura de las negociaciones de fusión con BBVA.
Al equipo de González-Bueno, que se incorporará oficialmente a la entidad cuando el Banco Central Europeo (BCE) dé el visto bueno al nombramiento, se sumará también Leopoldo Alvear (Madrid, 1971), hasta ahora director financiero de Bankia, entidad que está a punto de fusionarse con Caixabank. Alvear relevará en el cargo a Tomás Varela, que está vinculado al banco catalán desde hace tres décadas, los últimos 20 años como director financiero.
Guardiola y Varela presentaron los resultados del 2020 por última vez junto al presidente del Sabadell, Josep Oliu, que dejará sus funciones ejecutivas cuando González-Bueno asuma el cargo.
El banco incorpora como director financiero a Leopoldo Alvear, que tenía en Bankia ese mismo cargo