¿Investidura a finales de marzo o repetición en julio?
Si en mes y medio no es elegido ‘president’ ningún candidato, las urnas volverán a colocarse en Cataluña en pleno verano
Después de las elecciones catalanas, celebradas finalmente este 14 de febrero, se activan los mecanismos para constituir el Parlamento regional en las próximas semanas e investir al nuevo presidente catalán a finales de marzo como muy tarde, aunque, en caso de no haber mayoría para ello, Cataluña se vería abocada a una repetición electoral en julio.
La Cámara catalana salida de las urnas después de esta votación deberá constituirse dentro de los veinte días hábiles posteriores a los comicios, lo que significa que el plazo límite es el 12 de marzo.
En esa sesión constitutiva, los 135 diputados elegirán al nuevo presidente del Parlamento regional, así como las dos vicepresidencias y las cuatro secretarías de la Mesa de la Cámara catalana.
Dentro de los diez días hábiles posteriores a la constitución del Parlamento autonómico, se deberá celebrar el pleno de investidura, que en caso de agotarse los plazos tendría lugar como muy tarde el 26 de marzo.
Corresponde al presidente de la Cámara la proposición de un candidato para la sesión de investidura –que debe ser uno de los 135 diputados–, después de haber abierto consultas con los líderes de las fuerzas con representación parlamentaria para sondear quién podría reunir la mayoría necesaria para ser investido.
La investidura del president requiere inicialmente el respaldo de la mayoría absoluta del
Parlament, es decir, un mínimo de 68 diputados, y si el candidato en cuestión no alcanza esa cifra, puede someterse dos días después a una segunda votación, en la que le bastará la mayoría simple, más votos a favor que en contra.
Si el candidato a la investidura no consiguiese ser elegido por la Cámara catalana, entonces se abriría un plazo de dos meses –a contar desde la primera votación fallida–, tiempo en el que podría haber más debates de investidura.
Finalizados esos dos meses, en caso de que se hubiesen agotado previamente todos los plazos sería el 26 de mayo, sin haber podido desbloquear la inves
El ‘Parlament’ quedaría disuelto el 26 de mayo en caso de que se agotasen los plazos
tidura, el Parlament quedaría automáticamente disuelto y se convocarían nuevas elecciones en Cataluña, a celebrar al cabo de 54 días, es decir, aproximadamente a mediados de julio.
A esa situación se estuvo a punto de llegar después de las elecciones del pasado 27 de septiembre de 2015, cuando la CUP se negó a investir al candidato de Junts pel Sí, Artur Mas, que dio in extremis un paso atrás y propuso en su lugar al hoy fugado Carles Puigdemont, investido en el último suspiro, antes de que fuesen convocados automáticamente nuevos comicios.