El civismo en la red empeora con la pandemia
SI acudimos a la Real Academia Española encontramos el significado real que tiene la palabra civismo: “Comportamiento respetuoso del ciudadano con las normas de convivencia pública”. Dentro y fuera de la red. Es más, en el ámbito digital también recibe otros términos como cultura 2.0, entre otros.
Al fin y al cabo, responde a tener o no tener educación sea en el ámbito que sea. En este sentido, el civismo en internet empeoró desde el arranque de la pandemia de Covid-19 para el 21% de los españoles, momento en que un mayor número de personas recurrieron al universo digital para desahogarse y plasmar sus frustraciones, si bien también una cuarta parte asegura haber notado una mejora, que atribuye a un sentimiento colectivo de “estamos todos juntos en esto”.
La compañía Microsoft ha publicado recientemente los nuevos datos de su Índice de Civismo Digital (ICD), Civismo, seguridad e interacciones online2020, en el que de forma anual y desde hace cinco años, analiza el estado de civismo digital de adolescentes y adultos en distintos países en todo el mundo.
Para comprender mejor aún el índice, la compañía señala que cuanto más baja sea su lectura (en una escala de 0 a 100), menor será la exposición al riesgo de los encuestados y mayor será el nivel de civismo on line percibido por las personas de ese país.
De este modo, el ICD global que se desprende del estudio de Microsoft se sitúa en el 67%, lo que supone una mejora de tres puntos porcentuales con respecto a los resultados de 2019.
Educación 2.0 en España
En el caso de España, cuyos datos se han incorporado por primera vez a este informe, los resultados se sitúan a la par de la media global, con un 67%, sólo por debajo de otros países en Europa, como Dinamarca, Irlanda y Suecia, con un 68%, 74% y 78%, respectivamente.
Reino Unido y Alemania: mejor civismo ‘on line’
Italia se coloca en una posición más favorable que España, aunque con una diferencia de tan sólo tres puntos porcentuales, mientras que Países Bajos (51%), Reino Unido (55%) y Alemania (62%) encabezan la lista de países que mejor civismo on line registran en esta región europea, según los encuestados por Microsoft.
En el ranking mundial, los países con las lecturas más altas de incivilidad on line son Sudáfrica (81%), Rusia (80%) y México (76%).
Adolescentes
Por grupos de edad, los adolescentes fueron los responsables de la notable mejora del civismo on line en general. De hecho, el índice de civismo digital de los adolescentes en los 32 países mejoró en tres puntos, pasando de 66% en 2019 al 63% en 2020, mientras que entre los adultos mejoró sólo un punto porcentual, situándose en un 71%, frente al 72% del año anterior.
El informe recoge que España va en línea a los resultados globales, con un 64% en el ICD entre los adolescentes y un 70% entre los adultos. En la categoría personal/intrusiva, por ejemplo, el contacto no deseado mejoró notablemente. La compañía destaca que se trata de “un avance importante”, porque este tipo de contacto ha sido “la preocupación más común entre los encuestados durante los cinco años de esta investigación”.
A nivel global, el 34% de los encuestados consideran que el civismo digital había sido favorable, un 24% neutral y un 43% lo veía desfavorable en términos de contacto no deseado, en comparación con hace un año. Estos datos en España difieren: favorable (39%), neutro (41%) y desfavorable (20%).
Además, los jóvenes en todo el mundo mostraron puntuaciones más positivas en las cuatro categorías analizadas (comportamiento, sexual, reputación y temas de índole personal/intrusivo), y entre ellos, los sexuales cayeron casi cuatro puntos porcentuales en el Índice global de 2020 respecto a 2019.
La mayor concienciación de los adolescentes sobre los riesgos que pueden encontrar en internet, como la sextorsión y la captación de menores a través de la red con fines sexuales o de otro tipo, podría estar detrás de la mejora, como apuntan desde Microsoft. Aun así, alrededor del 40% de los adolescentes encuestados a nivel global afirman haber estado implicados en un incidente de acoso, bien como objeto del mismo (13% en España), o como espectador (33% en España). Por su parte, el 10% de los adultos afirman haber estado involucrados en un incidente de acoso en el trabajo. En conjunto, el 38% de los encuestados señalan haber estado involucrados en un caso de este tipo, con el 19% identificándose como objetivo, el 21% como espectador y el 1% como colaborador y acosador.