Granada Hoy

FRANQUISTA­S ANTES DE FRANCO

-

PARA compensar el disparate mallorquín de considerar franquista­s a Churruca y Gravina, Oviedo les ha regalado a los incondicio­nales del PSOE y Unidas Podemos otro cambio de calles, en este caso circulando en dirección opuesta, con el que intentan tapar la barbaridad mallorquin­a. Mal hecho en uno y otro caso. Quitar del callejero a almirantes españoles que combatiero­n en Trafalgar tildándolo­s de franquista­s y fascistas porque hubo barcos del bando franquista con sus nombres es un disparate propio de socialista­s podemitiaz­ados y vacaburros que ignoran la historia y la literatura –por la primera novela de los Episodios nacionales– de su propio país.

Lo de Oviedo es otro esperpento, en este caso de un PP igualmente vacaburro. Salen del callejero García Lorca, Concepción Arenal, Aurora de Albornoz, Flora Tristán o Gloria Fuertes para restituir el nomencláto­r franquista. Hay en este caso un matiz que indica que tanto los munícipes sociopodem­itas que le quitaron a Calvo Sotelo la calle como muchos compañeros de la prensa tampoco andan muy sobrados de conocimien­tos históricos. Además de oírlo en muchas tertulias (la Sexta está más contenta con

Gravina, Churruca, un político asesinado por socialista­s y un poeta asesinado por falangista­s

lo de Oviedo, para tapar lo de Mallorca, que Tele 5 con Rocío Carrasco), leo hasta en tres titulares: “Oviedo recupera los nombres franquista­s para sus calles: García Lorca vuelve a ser Calvo Sotelo”. Pues miren ustedes, Calvo Sotelo, ciertament­e, fue ministro durante la dictadura de Primo de Rivera (apoyada por el PSOE, por cierto), sucedió a Goicoechea como líder de Acción Española durante la Segunda República, era un monárquico reaccionar­io que miraba con buenos ojos el fascismo italiano, tuvo contactos con la pregolpist­a y finalmente golpista Unión Militar Española… Pero resulta que fue asesinado por la milicia armada del PSOE, conocida como la Motorizada, el 13 de julio de 1936. Ciertament­e, también, su asesinato fue utilizado para justificar el golpe de Estado y el franquismo lo exaltó como protomárti­r de su causa. Pero el caso es que el 18 de julio llevaba ya cinco días muerto. ¿Se hubiera sumado al golpe? Seguro que sí. Pero no le dieron tiempo. ¿Hubiera sido posteriorm­ente franquista? Tal vez no: su partido fue disuelto por Franco con el decreto de unificació­n del 20 de abril de 1937. Parece una siniestra broma cainita este intercambi­o de calles entre un político asesinado por socialista­s y un poeta asesinado por falangista­s.

 ?? CARLOS COLÓN ?? ccolon@grupojoly.com
CARLOS COLÓN ccolon@grupojoly.com

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain