TIEMPOS OPACOS
LA pandemia causada por el Covid-19 y los desafíos que el futuro del bienestar social tiene que afrontar ante la magnitud del impacto económico y de los retos sociales, productivos y laborales que enfrenta la sociedad actual, han oscurecido el ambiente y las expectativas de cientos de millones de personas en todo el mundo.
La fatiga pandémica y las incertidumbres sobre el futuro generan un pesimismo social que debe preocuparnos porque genera un terreno abonado a la demagogia. Se hace imprescindible un esfuerzo especial para minimizar dichas incertidumbres y ello sólo es posible en un ambiente favorable al consenso. Ambiente inexistente por desgracia.
¿Por qué es necesario un esfuerzo colosal para acabar con el pesimismo? Porque, además de vivir en un terreno abonado a la demagogia y ser una situación favorable a problemas de salud mental (en especial la depresión), la sociedad necesita las máximas dosis posibles de optimismo y certidumbre.
Esto es algo realmente difícil da
La fatiga pandémica y las incertidumbres sobre el futuro generan un pesimismo social que debe preocuparnos
dos lo tiempos opacos en los que estamos envueltos porque la pandemia aún nos golpea y los inconvenientes para superarla siguen presentes aún. Pero también, porque las consecuencias en desigualdad y las reformas necesarias para superar el riesgo de desigualdad haciendo más fuerte nuestro modelo productivo, necesitan un esfuerzo de trabajo conjunto y de generación de consenso que la ciudadanía debe poder verlo. Y no lo ve.
Es por eso que considero imprescindible cambiar el rumbo de los asuntos públicos. Y hay algunos protagonistas que deben hacer un profundo examen de conciencia y ponerse manos a la obra hacia la concertación de prioridades y esfuerzos. Gobiernos, partidos políticos, empresarios y sindicatos tienen esa responsabilidad. Y detrás de ellos, la sociedad.
Soy consciente que puede parecer ingenuo pensar y creer que esto vaya a ser posible en España. Aún así, es imprescindible afrontar esta tarea. Nada es imposible por difícil que resulte. Hay que acabar con estos tiempos opacos. Es urgente y necesario.