Mesa de la zona Norte: solventar los cortes ajenos a los enganches
● Las instituciones señalan la necesidad de diferenciar cuáles son para droga y así garantizar la luz
El problema de los cortes de luz es, por desgracia, otra de esas historias interminables de Granada, donde por más mesas políticas que se constituyan la complejidad del asunto es tal que la realidad y el día a día de muchos vecinos de la zona Norte es cruda mientras el fraude eléctrico sigue extendido. La Subdelegación del Gobierno de Granada acogió ayer otro encuentro de administraciones con representantes de la Junta, el Ayuntamiento de la capital, Endesa, la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Diputación, que es la última institución que se añade a estas reuniones. La conclusión de esta nueva reunión fue que la prioridad ahora mismo en la lucha contra los
La Junta pide cambiar la ley y endurecer sanciones ante una “cuestión de estado”
cortes de luz es diferenciar entre los enganches que están relacionados con el cultivo de droga y otros casos. De esta manera, se intentará garantizar la luz y la salud a personas electrodependientes que ahora mismo son los que más están sufriendo los continuos apagones.
La Fiscalía de Granada ha archivado denuncias recientes tanto del PSOE como de vecinos de la zona Norte contra Endesa argumentando el Ministerio Público que el problema radica en los cultivos de marihuana y que la solución pasa por una solución conjunta de las instituciones frente al fraude. Algo, en lo que incidió el consejero de Economía y Hacienda de la Junta, Juan Bravo, este pasado jueves al ser interpelado sobre este tema en el Parlamento. Al mismo tiempo, la compañía eléctrica ha notificado en las últimas semanas dos incendios en centros de transformación nuevos –con apenas un año de vida– por la sobrecarga por plantaciones de marihuana.
Al respecto, el delegado territorial de Vivienda, Antonio Granados, analizó ayer los datos de la auditoría realizada por Endesa en la zona Norte de la capital después de que el Gobierno andaluz abriera un expediente informativo a la compañía. Granados destacó que la Junta trabaja en la “apuesta ambiciosa” de garantizar que todos los vecinos electrodependientes tengan garantizado el suministro pese a estos continuos apagones. Apuntó además que ese trabajo parte de la elaboración de un censo que incluya a todas las personas con necesidades de una máquina que les ofrezca soporte sanitario, un listado que la Junta está elaborando con los centros de salud. El delegado también pidió que esta problemática se afronte como una “cuestión de estado” y que se modifique el ordenamiento para penalizar más los enganches ilegales a la electricidad.
El siguiente en hablar fue el concejal y presidente de la Junta Municipal de distrito Norte, Carlos Ruiz Cosano, quien subrayó la necesidad de combatir la estigmatización de un barrio en el que más del 90 % de sus vecinos “luchan, trabajan y sacan a sus familias adelante”.
Por parte de la Diputación de Granada, que ayer se sumó primera vez a la Mesa de la zona Norte para participar en la lucha contra los apagones, el dirigente de la institución provincial, José Entrena, recalcó que “debemos resolverlo desde diferentes ámbitos y con la exigencia de que quien paga reciba un suministro de calidad”
En último lugar, como anfitriona del encuentro inter vino la subdelegada del Gobierno, Inmaculada López Calahorro, que se encargó de detallar que las fuerzas policiales han realizado en el distrito 21 operaciones con 21 detenidos este año y han acompañado a técnicos de Endesa en 586 inter venciones para comprobar instalaciones.
La Subdelegación ha pedido a la empresa que presta el ser vicio, que en su auditoría habla de 5.000 enganches, que determine cuántos están relacionados con el cultivo de droga para diferenciar entre las casuísticas. También apuesta por crear una mesa de trabajo que siga las recomendaciones del Defensor del Pueblo andaluza y que sirva para hacer un seguimiento de cada una de las acciones.
López Calahorro recordó que en el distrito Norte hay 17.000 hogares y 12.000 tienen contrato, por lo no se puede relacionar “categóricamente” el cultivo de droga y los apagones.
Datos que remarcan la complejidad de un drama social en el que pagan muchos justos por pecadores, desde hace muchos años porque no se ve la luz.