Rocío Flores está ahora en el punto de mira
Su madre confirma la paliza que le dio hace casi 10 años. “No era ella la que me pegaba, era su padre”, dice Carrasco
Rocío Carrasco se sentó la noche del miércoles en Telecinco para hacer un alto en el documental en el que narra su vida para responder algunas de las preguntas que han surgido desde que se estrenó. Regresaba a la televisión tras diez años para hablar por primera vez de su vida, y la otra protagonista de a noche fue su hija, Rocío Flores, quien de momento no ha reaccionado a las declaraciones de su progenitora. Con gesto serio y bajo una gorra y la correspondiente mascarilla, la joven, de 25 años, fue vista ayer con su novio, Manuel, saliendo de su casa.
Vestida con un traje azul klein y con el rompedor peinado que luce desde hace tiempo, con un lado de la cabeza rapado al cero y por otro melena rizada suelta, entró en el plató visiblemente nerviosa. La entrevista comenzó con las imágenes de su hija, Rocío Flores, de hace unos días en El programa de Ana Rosa, donde colabora desde hace poco, rogando a su madre que le cogiese el teléfono. “Mamá, llámanos, a tus hijos no te los ha arrancado nadie”, pidió.
Rocío Carrasco confirmó que su hija la había llamado en tres ocasiones en los últimos días y anteriormente el 3 de diciembre de 2020, pero desmintió que lo haya hecho antes y negó rotundamente que le haya contestado en alguna ocasión “No vuelvas a llamar aquí, no soy tu madre”, como ella aseguró.
Sobre los motivos por los que no le coge el teléfono ni mantiene relación con sus dos hijos, Rocío explicó que “no estoy preparada para eso, sé que ella tampoco, sé que las condiciones no son las idóneas y que todo lo que gira en torno no es ambiente idóneo”. Ella considera que tiene que pasar más tiempo y que lleva años trabajando para ello de la mano de “terapia y fármacos” y que el equipo médico que la lleva desde hace años por el “síndrome ansioso depresivo moderado y grave cronificado en el tiempo”, le desaconsejó por el momento responder a esas llamadas. “No quiero volver a tener vómitos, a lo de antes… me ha costado mucho”, confesó, temiendo volver a pasar por momentos como su intento de suicidio.
Carrasco habló por primera vez de la agresión que sufrió por parte de su hija hace casi diez años, y que terminó con la menor, que por aquel entonces tenía 15 años, condenada por malos tratos continuados a su madre. Como se publicó hace un año, cuando Rocío Flores participaba en el reality
Supervivientes, los hechos ocurrieron el 27 de julio del 2012 y la discusión comenzó por una nectarina.
Rociíto aseguró que ella nunca denunció ni denunciaría a su hija, pero que al tener que acudir al hospital la Fiscalía actuó de oficio y
Llamó (a Antonio David) tras pegar a su madre y dijo: ‘Papá, ya está hecho”, contó Rocío Carrasco
por eso fue condenada. “Aquella mañana Rocío me agredió, pero no era ella la que me pagaba, era su padre. Porque quiero dejar claro ya desde el principio que mi hija fue verdugo porque antes fue víctima de esa persona (Antonio David Flores). Y era muy vulnerable”, manifestó.
Tras ese episodio, la menor abandonó el domicilio, se subió al coche y desde allí hizo una llamada a su padre. “Sé por el chófer, que tuvo que declarar, que mi hija cogió su móvil, llamó a su padre y le dijo: ‘Papá, ya está hecho’”, aseguró. “La paliza de mi hija es la obra maestra de Antonio David”, afirmó la hija de Rocío Jurado. Eso sí, pidió que no ataquen a su primogénita. “No la ataquen a ella. Ella no tiene la culpa. La culpa la tiene otra persona que es el responsable que ella actuara así”.
La noche contó con varias intervenciones de apoyo a Rocío Carrasco, pero la más importante fue la de su marido, Fidel Albiac, en una videollamada histórica, ya que ha intervenido en televisión en contadas ocasiones. “Me han puesto como 300 millones de trapos desde el minuto cero”, decía de todo lo que se ha dicho de él en los últimos 20 años. Rocío explicó que “eso es lo que ha sembrado la otra persona, todo lo que me ha hecho a mí, se ha plasmado públicamente que lo hace él, es otra parte del maltrato que él está ejerciendo. Cualquier persona que estuviera a mi lado, y a él le ha tocado porque estaba a mi lado y no se iba ni muerto”.
Uno de los momentos más tensos de la noche fue cuando Rocío Carrasco vio las declaraciones sobre ella de Alessandro Lequio. “Rocío Carrasco no estaba silenciada, siempre hablaba por detrás”, dijo. “Creo que no ha entendido nada pero tampoco me extraña... Porque perro no come perro”, respondió muy seria Carrasco, equiparando a su ex, Antonio David Flores, con Lequio. Tras afirmar esto, se ha viralizado en las redes sociales un extracto de una entrevista a Lequio de hace décadas en el programa Tómbola, en la que reconocía que había dado “algún bofetón” a alguna mujer.
La hija de La más grande también recriminó a María Patiño que le contó el supuesto episodio de la ventana con su ex hace 20 años, y ella no dijo nada. También negó Carrasco las manifestaciones de su tía. Rosa de Benito. “No voy a entrar en desmentir cosas que son absurdas”, afirmó.